Miguel Ángel Cirer volverá a la cárcel de Cipolletti. El conocidísimo ladrón de recibió una nueva condena de 5 años y 6 meses de prisión por una violenta entradera que dejó a una mujer gravemente herida, con fracturas en el rostro y costillas, que tuvo que ser internada en terapia intensiva durante una semana. La pena se dictó en un juicio abreviado, como acordó las últimas tres condenas que tuvo, que el propio acusado aceptó, luego de reconocer su culpa.
La entradera ocurrió el 20 de febrero de este año, minutos antes de las 4 de la madrugada, en una casa del barrio Obrero, en la calle San Antonio Oeste casi Manuel Estrada. La víctima, que estaba sola, escuchó ruidos en el patio y al abrir la puerta fue sorprendida por Cirer, quien llevaba la cara cubierta. La tomó por la fuerza, la introdujo a la vivienda y la maniató mientras la golpeaba salvajemente para que entregara dinero.
Los golpes provocaron fracturas graves en el rostro y en varias costillas, y la mujer debió permanecer internada en la Unidad de Terapia Intensiva del Policlínico Modelo hasta el 27 de febrero. Además del daño físico, el ladrón se llevó dinero, el celular de la víctima y una camioneta Renault Sandero Stepway, que abandonó horas después cerca del tercer puente, del lado neuquino.
La investigación no tardó en apuntar a Cirer como principal sospechoso. Cámaras de seguridad captaron al acusado cerca de la casa y en el rodado abandonado. Además, en el vehículo se hallaron pruebas de ADN que lo vinculaban directamente con el hecho. Declaraciones de testigos y la pesquisa policial completaron un cuadro contundente. Sin embargo, pese a la gran cantidad de pruebas, el fiscal Guillermo Ibáñez decidió acordar la pena en un juicio abreviado con el acusado. La víctima avaló la decisión al lograr una pena menor.
Antecedentes peligrosos
Este no es un caso aislado en la vida de Cirer. En 2012 protagonizó una fuga masiva de la cárcel de Cipolletti con otros dos peligrosísimos presos, Gabriel Andrés Ríos y José Luis Henriquez. Fue recapturado días después cuando huir tras un robo en una joyería en Cinco Saltos. El año pasado fue condenado a 7 meses de prisión efectiva por otra entradera en una vivienda, aunque logró ser reducido por el dueño de la casa. Pocos meses antes, había sido detenido intentando robar la batería de un auto en jurisdicción de la Subcomisaría 79°. La pena fue unificada en un juicio abreviado.
El tribunal que dictó la condena consideró todos estos antecedentes, la brutalidad del ataque y la confesión del acusado. Además, Cirer fue declarado reincidente, lo que asegura que la pena tendrá cumplimiento efectivo.