El barrio Villa Ceferino sigue siendo un "punto caliente" en cuanto a la inseguridad de la capital neuquina, y durante el fin de semana, hubo un hecho puntual que llamó la atención. A una vecina que colocó una cámara en la vía pública, con la intención de proteger su propiedad, no solo que se la robaron, sino que pudo ver a los delincuentes cuando activaron la misma, ya en el aguantadero donde viven los amigos de lo ajeno.
Según relató la periodista Carolina Pinto, en una de las recorridas que hace el Móvil de Prima Multimedios, la mujer instaló el dispositivo en un poste de luz, pero cuando quiso ver "que pasaba en la calle" al día siguiente, no pudo conectarse al mismo.
"Compramos la cámara para poder ver los hechos de inseguridad, a veces se escuchan gritos "me están robando" y uno quiere salir a mirar y te da miedo porque no sabes si te van a dar un tiro, una puñalada un palazo, somos personas grandes ya, y tenemos un poco de temor", relato una vecina del barrio Villa Ceferino.
La mujer contó que, junto a su marido, hacen pan para salir a vender a la calle, por lo que suelen acostarse tarde y levantarse de madrugada para terminar de cocinar. Así terminó el sábado pasado esta familia, que se fue a dormir a la 1. En ese momento, apagaron la cámara porque el celular, que es por donde pueden ver lo que filma el dispositivo de seguridad, se les había quedado sin batería.
Al día siguiente, cerca de las 5, se levantaron para hornear el pan, y su marido le dijo "viejita, prende la cámara así vemos que pasa en la calle", pero la mujer no pudo hacerlo. Por eso, se asomó a la vereda para mirar, y notó que la compra que les había costado "mucho esfuerzo" ya no estaba.
La mujer habló con varios vecinos, a quienes les pidió ver sus propias cámaras, en busca de identificar a quien le había robado. "Los vecinos no te quieren dar el video porque tienen miedo a una represalia, saben que enseguida lo hago publico", mencionó.
Sin embargo, una vecina si le permitió mirar el video, y pudo enterarse de que "el delincuente se trepo a un poste de luz como un mono, sin escalera", para robarse el aparato.
Lo llamativo de este insólito hecho delictivo, es que cerca del mediodía del día siguiente, el celular le avisó que la cámara se estaba conectando, y pudo ver "a una persona manipulando la cámara, él no nos ve a nosotros pero nosotros si a él", dijo asombrada la mujer. Evidentemente, el ladrón era un vecino de la señora.