Ibargoyen señaló que "el 85 por ciento de las roturas la realiza el EPAS. Menos mal que la empresa provincial no tiene el control postal porque sino rompería la puerta para entregar una carta. Es inentendible, por ejemplo, que hace 30 días reparamos una rotura en Pueyrredón y Río Negro, a tres cuadras de la residencia del gobernador, y hoy sigue emanando líquidos cloacales”.
"Tenemos entre 20 y 25 roturas por día y no son baches, ya que los baches se producen por desgaste del pavimento. Si desde hoy no se hiciera ningún agujero, necesitaríamos tres meses para tapar las diferentes roturas que hay en Neuquén. Otro ejemplo, en este caso de una constructora que realizó locales en Carlos H. Rodríguez y Salta. Hizo tres agujeros y nunca los tapó. La normativa indica que deben tapar los agujeros”.
Ibargoyen por otra parte destacó que " el año pasado Obras Públicas y los inspectores recibieron 300 trámites de apertura, cuando en realidad se deben haber realizado más de tres mil. Esta es una falla nuestra como municipio. No tenemos que descansar y debemos solucionar este tipo de problemas”.