NEUQUÉN
Enfermero irá a juicio, imputado por abandono de persona
Un enfermero que tenía un geriátrico en la ciudad de Centenario y en el que murió un hombre de 88 años, será juzgado como supuesto autor del delito de abandono de persona.
Neuquén – Un enfermero que tenía un geriátrico en la ciudad de Centenario y en el que murió un hombre de 88 años, será juzgado como supuesto autor del delito de abandono de persona.
La decisión se tomó ayer durante una audiencia de control de acusación que dirigió el juez de garantías Mauricio Zabala y que se realizó en Yrigoyen 175 de la capital provincial.
El fiscal del caso Maximiliano Breide Obeid (foto, Fiscalía de Delitos Violentos contra las Personas), acusó a P. P por el delito de abandono de persona (artículo 106 del Código Penal). Y como la pena prevista oscila entre los 3 y 15 años, intervendrá un tribunal colegiado.
La teoría del caso del Ministerio Público Fiscal es que el acusado, "al menos desde el año 2012 y como propietario de un hogar para ancianos en Centenario, puso en peligro la vida de Julio Alberto Freidos al no cumplir con su obligación de garante asumida ante la familia de la víctima”, señaló el fiscal del caso.
Añadió que "concretamente se le reprocha que como encargado del geriátrico y siendo auxiliar de enfermería descuidó la atención de Freidos, lo que le provocó según la autopsia un deterioro en la salud física”. Y describió que "la víctima había ingresado a ese lugar ya que funcionaba como geriátrico de ancianos y durante el periodo que estuvo alojado, existió un contrato a partir del cual sus hijos abonaban una suma de 4.000 pesos mensuales a cambio de su cuidado”.
El funcionario judicial dijo que "desde esa fecha Freidos dejó de caminar, estuvo postrado en una cama y tuvo varias lesiones como escaras, las cuales conforme surge del protocolo de autopsia no fueron atendidas y curadas como requerían. El día 25 de febrero de 2014 Freidos sufrió una descompensación en el geriátrico y fue trasladado al hospital donde llegó sin vida”.
También planteó que el geriátrico "no estaba habilitado como tal ni por la Municipalidad ni por el Ministerio de Salud”.
Entre la prueba que ofrecerá en el juicio, el fiscal del caso mencionó y el juez de garantías avaló, a inspectores del área de comercio del municipio de Centenario; informes del municipio sobre las infracciones realizadas en el lugar; la declaración de la médica que atendió a la víctima en el hospital; y el médico policial que participó del allanamiento del geriátrico, entre otros. Como defensor oficial, intervino Alfredo Ferreyra.
La decisión se tomó ayer durante una audiencia de control de acusación que dirigió el juez de garantías Mauricio Zabala y que se realizó en Yrigoyen 175 de la capital provincial.
El fiscal del caso Maximiliano Breide Obeid (foto, Fiscalía de Delitos Violentos contra las Personas), acusó a P. P por el delito de abandono de persona (artículo 106 del Código Penal). Y como la pena prevista oscila entre los 3 y 15 años, intervendrá un tribunal colegiado.
La teoría del caso del Ministerio Público Fiscal es que el acusado, "al menos desde el año 2012 y como propietario de un hogar para ancianos en Centenario, puso en peligro la vida de Julio Alberto Freidos al no cumplir con su obligación de garante asumida ante la familia de la víctima”, señaló el fiscal del caso.
Añadió que "concretamente se le reprocha que como encargado del geriátrico y siendo auxiliar de enfermería descuidó la atención de Freidos, lo que le provocó según la autopsia un deterioro en la salud física”. Y describió que "la víctima había ingresado a ese lugar ya que funcionaba como geriátrico de ancianos y durante el periodo que estuvo alojado, existió un contrato a partir del cual sus hijos abonaban una suma de 4.000 pesos mensuales a cambio de su cuidado”.
El funcionario judicial dijo que "desde esa fecha Freidos dejó de caminar, estuvo postrado en una cama y tuvo varias lesiones como escaras, las cuales conforme surge del protocolo de autopsia no fueron atendidas y curadas como requerían. El día 25 de febrero de 2014 Freidos sufrió una descompensación en el geriátrico y fue trasladado al hospital donde llegó sin vida”.
También planteó que el geriátrico "no estaba habilitado como tal ni por la Municipalidad ni por el Ministerio de Salud”.
Entre la prueba que ofrecerá en el juicio, el fiscal del caso mencionó y el juez de garantías avaló, a inspectores del área de comercio del municipio de Centenario; informes del municipio sobre las infracciones realizadas en el lugar; la declaración de la médica que atendió a la víctima en el hospital; y el médico policial que participó del allanamiento del geriátrico, entre otros. Como defensor oficial, intervino Alfredo Ferreyra.