Dos provincias, un niño, y una disputa entre padres

La Sala Segunda de la Cámara de Apelaciones en lo Civil del Neuquén revocó una resolución del Juzgado de Familia, y dispuso enviar a los Tribunales de la localidad rionegrina de Roca, la disputa que por el cuidado de un niño mantienen su padre (neuquino) y su madre (rionegrina).

Los jueces integrantes de esa Sala -Federico Gigena Basombrío y Patricia Clerici- citaron jurisprudencia y dejaron en claro que, ante cualquier conflicto de intereses, deberá priorizarse el interés moral y material de los menores. Solo que en este caso la particularidad radica en que involucra a dos provincias.

La madre -que había sido demandada por el padre- apeló la resolución con la que el Juzgado de Familia había declarado su competencia, y para ello argumentó que la vida del niño transcurrió y sigue transcurriendo en Roca.

Señaló que fue en esa ciudad donde nació y vivió sus dos primeros años y medio, para luego trasladarse a Neuquén y regresar a principios de este año. Dijo que jamás vivió con su papá, que concurre a un jardín de infantes de esa ciudad en la que tiene a "todos sus vínculos afectivos” (familiares); y que "no existe elemento alguno” que acredite que la residencia en Neuquén fue por consentimiento de ambos padres. Por el contrario, lo atribuyó a cuestiones de trabajo de ella.

Convocado por el Tribunal de Alzada, el padre sostuvo que se opuso a que su hijo se mudara a Roca, que se mudó sin su consentimiento, que la mamá manipula la situación y dificulta el contacto con él, y que no sabe con quién se queda el pequeño mientras la demandada trabaja en Neuquén.

Tras escucharlo, los jueces concluyeron que el niño "nació y actualmente reside” en Roca con su mamá, y que en consecuencia "el juez competente para entender en esta causa será el correspondiente a su domicilio actual”. Por lo que al menos este capítulo lo ganó la mamá.