Un accidente que encendió todas las alarmas
El vuelco del minibús que trasladaba niños de una colonia de vacaciones desde Pilo Lil generó preocupación y angustia en toda la región. El siniestro ocurrió el sábado por la tarde sobre la Ruta Nacional 22, a metros del puesto caminero de Senillosa, y dejó un saldo total de 21 personas heridas.
De ese total, 16 eran menores de edad, lo que activó de inmediato un operativo de emergencia de gran magnitud.
“No son frecuentes estos eventos con víctimas pediátricas”
En diálogo con la AM550, la secretaria de Emergencia y Gestión de Riesgo, Luciana Ortiz Luna, explicó la magnitud de la respuesta desplegada por la Provincia.
“No son frecuentes estos eventos de víctimas múltiples y menos de víctimas pediátricas, y nos pone con una alerta más sensible”, señaló.
Sobre el operativo, detalló:
“Fueron 21 pacientes en total. Trabajaron ocho ambulancias, cuatro del SIEN, dos de Senillosa y dos de Plottier, además de bomberos de esas localidades”, precisó.
Todos los niños, fuera de peligro
Desde el gobierno de la provincia de Neuquén se confirmó que todos los niños que viajaban en el minibús ya fueron dados de alta médica. Presentaban escoriaciones y golpes, pero evolucionaron favorablemente y no registraron lesiones de gravedad.
“Los niños ya fueron dados de alta en buen estado general, solo con escoriaciones y golpes”, afirmó Ortiz Luna.
La noticia llevó alivio a las familias luego de horas de tensión y seguimiento permanente del estado de salud de los menores.
Un despliegue sanitario sin precedentes
El operativo incluyó la intervención de ocho ambulancias, equipos del Sistema Integrado de Emergencias del Neuquén (SIEN), personal de hospitales de Senillosa, Plottier y Cutral Co, bomberos voluntarios y efectivos policiales de distintas unidades.
Los heridos fueron derivados a distintos centros de salud para una atención rápida y ordenada. Mientras los menores ya recibieron el alta, dos adultos continúan internados en el hospital Castro Rendón.
Acompañamiento a las familias durante la noche
Durante la noche posterior al accidente se montó un dispositivo especial en Senillosa para recibir y contener a los padres que viajaban para reencontrarse con sus hijos. Se dispusieron espacios de descanso y se brindó asistencia médica y acompañamiento psicológico.
Las familias permanecieron en el lugar hasta la mañana siguiente, cuando pudieron regresar a sus hogares junto a los niños.
“A la noche se armó un operativo para poder recibir a los padres que venían en viaje. Se dispusieron catres y colchones, y fueron asistidos padres y niños por pediatras, equipos del hospital de Senillosa y psicólogos”, explicó Ortiz Luna por AM550.
Previsibilidad y respuesta del Estado
La coordinación entre Salud, Seguridad, municipios y organismos provinciales permitió dar una respuesta inmediata ante una situación crítica, especialmente sensible por la cantidad de menores involucrados.
La confirmación del alta médica de todos los niños marca el cierre de las horas más angustiantes del episodio y refuerza la importancia de contar con un sistema de emergencias activo y articulado para actuar cuando más se lo necesita.
Un llamado de atención en las rutas
Mientras avanza la investigación para determinar las causas del choque, el hecho vuelve a poner en foco la seguridad vial en corredores de alto tránsito como la Ruta 22.
Esta vez, la noticia trae alivio: todos los niños están bien y con sus familias, luego de un accidente que mantuvo en vilo a toda la provincia.