RÍO NEGRO
Incumplimiento récord de la Provincia
Un vecino de Cipolletti terminó de pagar el plan en 2010. Y recién ahora le entregarán los materiales para la construcción de su vivienda.Al ritmo en el que vivimos, el 2010 parece demasiado lejano en el tiempo. Aquel año se jugó el Mundial de Sudáfrica, falleció Néstor Kirchner y un vecino de Cipolletti terminó de pagar el plan para la construcción de su vivienda ¿Qué tiene de trascendente esto último? Que tuvo que esperar hasta este año para que le entreguen los materiales.
En efecto, en el epílogo de la última semana, el Superior Tribunal de Justicia (STJ) confirmó una sentencia de la Cámara Civil de esa ciudad, y condenó al instituto provincial de la Vivienda (IPPV) a entregarle los materiales que necesita para terminar su casa.
También ordenó que lo indemnicen con 20.360 pesos más intereses, por el daño moral que le provocó el incumplimiento del contrato.
En su apelación (rechazada por el STJ) la Provincia había ensayado un argumento grotesco. Dijo que el plazo de 10 días que le había otorgado el juez de primera instancia para cumplir con la entrega era “exiguo”, pues impedía concretar el “procedimiento administrativo” para la compra de los materiales.
Fuentes judiciales señalaron que todo comenzó en enero de 2007, cuando este vecino firmó un contrato con la ya liquidada empresa estatal “Viviendas Rionegrinas SE”, que dependía del IPPV.
El objeto de aquel contrato era, justamente, “la entrega de materiales para la construcción de una vivienda básica mínima” en Barda del Medio.
El hombre demostró que en febrero de 2010 terminó de pagar el total de lo acordado, mediante sucesivos descuentos mensuales en sus haberes como empleado público provincial. Sin embargo, la empresa sólo le entregó las barras de hierro de 6 y 8 milímetros.
Ahora respecto del plazo de 10 días para cumplir, el juez del STJ, Sergio Barotto sostuvo: “A mi entender resulta lógico en razón a que (…) desde la fecha de celebración del contrato a la actualidad han transcurrido once años para poder efectivizar el cumplimiento de entrega de los materiales”.
“Aparece así como una enormidad inaceptable que habiendo transcurrido largos años desde aquellas fechas se pretenda un mayor plazo que el concedido por la Cámara de Apelaciones”, sostuvo.