VERANO CALIENTE
Faltan aeronaves para combatir los incendios
El verano arrancó con dos focos activos en la cordillera que desnudan falta de inversión en el área.Hace dos semanas que arden los bosques nativos en cercanías de los lagos Martín y Steffen en Bariloche, y unos días menos en Aluminé, donde las llamas avanzan descontroladas hacia sectores poblados. Pese a ser una situación dramática y con la seguridad de que será un verano de alto riesgo, en el norte de la Patagonia sólo quedaron operando 2 aviones hidrantes y 2 helicópteros.
El alerta surgió en los últimos días, cuando dos de las aeronaves que intentaban mitigar las llamas en el lago Martín, a unos 70 kilómetros al sur de Bariloche, fueron destinadas a Aluminé. Pero esa no fue la única mala noticia para esa zona protegida de la cordillera rionegrina, ya que otro avión anfibio que cargaba agua del lago, tuvo que volver a Córdoba.
El contrato por el que llegó esa aeronave a Bariloche fue de sólo una semana, por lo que al cumplirse los siete días estipulados, debió emprender un vuelo hacia aquella provincia, donde también los incendios forestales son moneda corriente, teniendo en cuenta la importante sequía que afectó al país durante este año.
Actualmente, y mientras desde Nación se promociona la creación de un comité de emergencia para articular acciones, ya se quemaron alrededor de 1500 hectáreas en el sur de Bariloche y unas 700 en Aluminé, los brigadistas trabajan en el campo combatiendo las llamas cuerpo a cuerpo con escasa asistencia aérea.
Hasta el verano de 2020 había 5 aviones en la zona cordillerana de Neuquén, Río Negro, y dos en el norte de Chubut que podía acudir en auxilio ante una situación particular. También había tres helicópteros hidrantes, en San Martín de Los Andes, en Bariloche y en Esquel, pero la gestión del ministro de Medio Ambiente Juan Cabandie dispuso que solo quedarían dos de estas últimas aeronaves en este sector de la Patagonia.
En San Martín de los Andes, había un avión hidrante y un helicóptero Bell UH-1H; en Bariloche, 2 aviones hidrantes, 1 de observación y un helicóptero Bell UH-1H; en El Bolsón había un avión hidrante permanente y en caso de una situación fuera de control se podía pedir la asistencia de las aeronaves del norte de Chubut, que estaban en Esquel y Cholila.
El jefe del área del área de Incendios, Comunicaciones y Emergencias (ICE) del Parque Nacional Nahuel Huapi, Pedro Curruhual, se quejó de la falta de medios para combatir los incendios y responsabilizó al estado nacional. "Teníamos 3 aviones y dos helicópteros operando en el incendio de Lago Martin pero tres de las unidades fueron trasladadas a Aluminé donde hay otro incendio descontrolado y el avión anfibio volvió a Córdoba porque solo estaba pautada una semana de trabajo”.
Desde los cuarteles de bomberos de la zona cordillerana aseguraron que en caso de una emergencia, no hay ninguna aeronave de respuesta rápida que pueda sofocar un foco antes de que salga de control.
En tanto, desde el Ministerio de Medio Ambiente de Nación se envió un parte de prensa en el que aseguran la creación de un comité para articular acciones con el SPLIF de Río Negro y Defensa Civil de las diferentes ciudades. Explican que "dadas la gran complejidad del terreno con pendientes pronunciadas, las amplias distancias entre los puntos de trabajo, el material combustible de vegetación acumulado, la sequía imperante, las condiciones meteorológicas con altas temperaturas, los vientos de diferentes sectores y variada intensidad, se ha enmarcado una táctica desde el inicio del fuego tendiente a trabajar con cuadrillas conformadas por una cantidad reducida de combatientes, que priorice la seguridad del personal en el terreno".
Pero nada dice de la falta de medios para combatir el fuego desde el aire.