La Unión Cívica Radical (UCR) de Neuquén mantuvo un encuentro el sábado por la tarde de carácter político, el primero después de las elecciones nacionales legislativas del 26 de octubre, donde el partido centenario no participó en la provincia norpatagónica.
La reunión sirvió para que, de alguna manera, el espacio identificado con los colores rojo y blanco se presente como una alternativa hacia el 2027 que le permita cambiar su destino político, teniendo en cuenta las fracturas internas que ha mostrado el partido tanto a nivel regional como nacional, donde numerosos representantes decidieron apoyar algunas políticas económicas del presidente Javier Milei contrarias a los principios del radicalismo, como por ejemplo la defensa de la educación pública.
La posible participación activa de la UCR en las elecciones provinciales del 2027 probablemente se verá afectada por la polarización que se visualiza en el ámbito nacional, y que en Neuquén está protagonizada por La Libertad Avanza (LLA) y La Neuquinidad, de acuerdo a lo que marcó la contienda legislativa del pasado mes.
Pero también, el encuentro partidario de ayer por la tarde sirvió para analizar el contexto tanto nacional como provincial, en el marco del proceso de renovación de autoridades partidarias 2026/2028.
En ese sentido vale recordar que Juan Peláez, quien encabezó el encuentro, se alejó hace varios meses de la conducción de la Unión Cívica Radical y actualmente es primer delegado del Comité Nacional. Además, se alejó hace ya tiempo del Gobierno de Rolando Figueroa por algunas diferencias ideológicas, tras desempeñarse en el rol de secretario de Producción e Industria.
A través de sus redes sociales, el propio Peláez manifestó acerca de la reunión: “El radicalismo cuenta con una doctrina sólida, basada en valores y principios que nos permiten seguir aportando al desarrollo de nuestro país, nuestra provincia y cada una de nuestras comunidades”.
Y agregó que “estamos convencidos que, a través de la unidad de todos los radicales y con una convocatoria amplia y abierta, podremos consolidarnos como una alternativa positiva y necesaria para el futuro”.
La UCR de Neuquén se encuentra luchando contra sus propios demonios. La decisión de no participar en las elecciones legislativas del 26 de octubre desnudó la falta de consensos para ofrecerse como una alternativa a los espacios de poder hegemónicos.
Mientras tanto, el partido centenario está cada vez más dividido en el Congreso de la Nación, con figuras como la del neuquino Pablo Cervi, diputado nacional radical y electo senador por La Libertad Avanza.