La purga administrativa impulsada por el gobernador Rolando Figueroa sumó dos nuevos despidos en el Estado provincial. En las últimas horas, el Ejecutivo convalidó la cesantía de dos empleados públicos que cometieron faltas graves: un auxiliar de servicio del sistema educativo y un chofer de ambulancia del hospital de Tricao Malal.
El caso del portero acusado de acoso
El Consejo Provincial de Educación (CPE) resolvió la cesantía de Feliciano Ramírez, auxiliar de servicio en el Centro Provincial de Enseñanza Media N° 57 de San Martín de los Andes, tras una denuncia por acoso a una estudiante menor de edad.
Según el expediente, el 31 de octubre de 2023 Ramírez fue separado preventivamente de sus cargos. El 13 de junio de 2025, el proceso disciplinario llegó a su instancia final.
La investigación determinó que el trabajador invitó a pasear a la alumna en su camioneta, le dio dinero y la tomó del brazo para intentar besarla. Los auditores del CPE concluyeron que su accionar constituyó una “conducta impropia” e incompatible con el servicio público.
En su descargo, Ramírez reconoció haber tenido contacto físico con la joven, pero lo definió como “un mimo”. El sumario administrativo confirmó la sanción de expulsión.
Hostigamiento laboral en un hospital de Tricao Malal
El segundo despido recayó sobre Luis Abelardo Olate, chofer de ambulancia del Hospital Tricao Malal, tras una investigación por maltrato laboral y hostigamiento a una compañera de trabajo.
La denuncia se formalizó en mayo de 2024 y derivó en un sumario. Según el informe final, Olate mantuvo conductas irrespetuosas y de menosprecio hacia su superior, lo que generó un clima laboral hostil entre 2022 y 2023.
La trabajadora afectada presentó denuncias internas y policiales y finalmente renunció al hospital por el acoso recibido. Con las pruebas reunidas, las autoridades determinaron que las faltas eran incompatibles con la función pública, y aplicaron la sanción máxima de cesantía.
Política de “tolerancia cero” en el Estado provincial
Desde el inicio de su gestión, el gobernador Rolando Figueroa ordenó tolerancia cero con los “ñoquis” y las inconductas administrativas dentro del Estado neuquino.
Las recientes expulsiones se suman a una serie de medidas disciplinarias que el Ejecutivo viene aplicando en distintos organismos, en el marco de una reestructuración interna y una política de mayor control sobre el empleo público.