En pleno centro de Cipolletti, una jugada del Loto cambió la suerte de alguien, aunque ese alguien todavía no lo sabe. Hace diez días, un vecino acertó cinco de los seis números del sorteo del 10 de mayo y se convirtió en acreedor de un premio de más de $1.600.000. La apuesta se realizó en la agencia oficial 24, ubicada en Roca 417, frente a la plaza principal de la ciudad. Sin embargo, el afortunado no se presentó a cobrar y la ansiedad crece a medida que pasan los días.
La modalidad en la que se ganó fue la Tradicional del Loto, y si bien el pozo mayor quedó vacante, siete jugadores en todo el país compartieron el premio secundario, entre ellos el cipoleño ausente. Los números que salieron esa noche fueron 25, 24, 29, 04, 20 y 23.
Desde la agencia sospechan que se trata de una persona que no tiene el hábito de jugar con frecuencia y, por eso, tal vez no revisó los resultados del sorteo. A diferencia del Quini 6, que da solo dos semanas para reclamar un premio, el Loto otorga 30 días. Quedan, entonces, apenas 20 días para que el jugador aparezca, antes de que el monto vuelva a la Lotería y a Santa Fe, como ya ocurrió en otras ocasiones.
No sería la primera vez que en esa misma agencia queda sin cobrar un premio importante. En una situación similar, un jugador nunca se presentó a reclamar $700.000 ganados con el Quini 6, lo que refuerza la idea de que muchos compradores eventuales desconocen que han sido favorecidos por el azar.
La situación recuerda lo sucedido hace poco en Villa Regina, donde un vecino ganó $690 millones en el Quini 6. Durante varios días no hubo noticias del ganador, hasta que finalmente se supo que había cobrado. En Cipolletti, por ahora, el misterio sigue intacto. El boleto premiado está en algún bolsillo, cajón o billetera, esperando ser descubierto.