SOLIDARIDAD
El aliento de los más chicos a los brigadistas que combaten el incendio en el Parque Lanín
En medio de las tareas para controlar el fuego, los brigadistas reciben mensajes de agradecimiento y apoyo por parte de los más chicos.El incendio en la zona centro del Valle Magdalena, dentro del Parque Nacional Lanín, que ya afectó 5000 hectáreas de bosque nativo, causó una gran conmoción en la población cordillerana que sigue atenta cada uno de los informes emitidos por las autoridades. Mientras más de 100 brigadistas combaten minuto a minuto las llamas que siguen activas en la zona, crece la bronca, la impotencia y el dolor al ver el paisaje arrasado por las llamas. Esa labor que despliegan los brigadistas y todo el personal abocado al operativo se intensifica al recibir las muestras de apoyo por parte de la comunidad.
El despliegue de los brigadistas y de los equipos es intenso y trabajan contrarreloj para contener el incendio en condiciones climáticas que, por momentos, no son favorables y en sectores de difícil acceso

En las últimas horas, las paredes de la central de operaciones del Parque Nacional Lanín comenzaron a cubrirse de dibujos con mensajes de apoyo que envían los chicos de la comunidad destinado a los brigadistas y el personal especializado de distintos organismos. "Estos son los dibujos que los vecinos nos comienzan a dejar en la Central para acompañar el trabajo de todo el equipo brigadistas y técnicos del Parque", informaron desde la oficina de comunicación del Parque Nacional Lanin.
Este miércoles el incendio se mantiene activo y los brigadistas se trasladaron al lugar para trabajar en los sectores de flanco izquierdo y derecho con ataque directo e indirecto, herramientas manuales y equipos de agua. En tanto, los helicópteros, aviones hidrantes operan con el traslado de personal y ataques directos con agua para evitar la propagación del incendio.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió un alerta amarilla por vientos del sector oeste con velocidades entre 40 y 55 kilómetros por hora y ráfagas que pueden superar los 85 kilómetros por hora, lo que podría incrementar el comportamiento del fuego en los sectores más activos.