Con una dura advertencia al Gobierno de Río Negro, más de 200 dirigentes de la agrupación Verde Anusate de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), incluyendo a los 24 secretarios generales de toda la provincia y de la agrupación Bordo René Salamanca de Bariloche se reunieron en Roca y concluyeron que “los estatales rionegrinos están muy mal”. El encuentro derivó en la decisión de impulsar el estado de alerta y asamblea permanente, exigiendo la inmediata convocatoria a paritarias.
Desde el sindicato se advirtió que en diciembre los trabajadores enfrentarán una “rebaja salarial sin precedentes”, con haberes que oscilarán entre 100.000 y 200.000 pesos según la categoría, lo que dejaría a más del 70% de los estatales bajo la línea de pobreza, actualmente fijada en $1.276.000. ATE denunció además un congelamiento salarial ilegal y el avance del pluriempleo en el sector público, obligando a miles de trabajadores a recurrir a un segundo o tercer empleo para cubrir necesidades básicas.
La organización también expuso la situación de más de 2.500 empleados vinculados mediante contratos precarios, a quienes se les niega el derecho constitucional a la estabilidad laboral. En este sentido, exigieron la renovación automática de todos los contratos que vencen a fin de mes y el pase a planta permanente de la totalidad de los precarizados.
ATE alertó que la desinversión y el desfinanciamiento del sistema público provincial deterioran la calidad de las prestaciones, pese al esfuerzo de los trabajadores, afectando directamente a los usuarios. Asimismo, reclamó el fin de la persecución laboral y sindical, señalando casos como el del Hospital de Cinco Saltos, donde se vulnera la Ley de Asociaciones Sindicales. El gremio no descarta medidas de acción directa si no hay respuestas inmediatas.
La advertencia de ATE se suma a los reclamos de otros sindicatos estatales como UPCN, que denunció la falta de diálogo y la pérdida del poder adquisitivo; UnTER, que exigió mejoras salariales sino estará en peligro el inicio de clases 2026 y ASSPUR que mantiene un fuerte cuestionamiento al Ministerio de Salud por la precarización y la falta de reconocimiento profesional. En conjunto, los gremios coinciden en que la situación de los trabajadores públicos atraviesa un momento crítico y que el Gobierno provincial debe dar señales claras de negociación y respuesta.