A tan solo dos días de que se lleve a cabo el partido entre Boca y Fluminense por la final de la Copa Libertadores 2023, los hinchas del “Xeneize” coparon las playas de Copacabana, Río de Janeiro, donde fueron atacados y emboscados por simpatizantes de Fluminense.
Según los testimonios de los hinchas de Boca, la Policía Militar de Río de Janeiro, lanzó balas de goma y gases lacrimógenos a la arena para detener la emboscada. El ataque de la barra organizada de Fluminense se dio en un marco de cinco minutos y la gran mayoría escapó rápidamente.
Más tarde, las autoridades informaron que reforzaron la seguridad en la zona de Copacabana y también en los barrios de Ipanema y Leblon.
"Estábamos tranquilos después de hacer un banderazo y llegaron muchos hinchas de Fluminense corriendo hacia la playa", dijo a Télam Felipe Rodríguez, un brasileño que acompañó la fiesta de los argentinos.
Según los efectivos policiales, un argentino fue detenido luego de patearle el perro a un brasileño que estaba en la playa y de arrojar una botella de vidrio contra la policía.