Un escándalo azota el fútbol brasileño con la acusación de que siete jugadores profesionales arreglaron partidos en años anteriores. Algunos clubes están separando futbolistas de planteles por sospechas.
En total la fiscalía de Goias recibió 16 acusaciones, pero siete futbolistas están señalados para declarar. Según la información de los medios brasileños, estos delitos se dieron en13 partidos, ocho de ellos de la pasada temporada del Brasileirao.
Un comunicado de la fiscalía informó que los procesados y llevados a juicio fueron Eduardo Bauerman del Santos, Víctor Ramos de Chapecoense, Gabriel Tota de Ypiranga de Rio Grando do Sul, Igor Carús de Sport de Recife, Paulo Miranda de Náutico, Matheus Gomes del Sergipe, y Fernando Neto del Sao Bernardo.
Desde e 2018 en Brasil las apuestas deportivas son legales, es por eso que la regulación de parte de la justicia es mucho mas severa en estas acusaciones. Algunos clubes ya comenzaron a separar jugadores del plantel por sospechas como el Fluminense y Cruzeiro.