Newells Old Boys de Rosario venció como visitante a Huracán por 2 a 0, con goles de Luciano Herrera y Carlos González, en un partido correspondiente a la 15ª fecha del Torneo Clausura 2025 de la Liga Profesional, que tuvo por escenario al estadio Tomás Adolfo Ducó del porteño barrio capitalino de Parque Patricios.
La Lepra ganó después de seis encuentros y le escapó al fantasma del descenso, mientras que el Globo quedó fuera de la zona de clasificación a los playoffs y los hinchas volvieron a insultar al equipo y al director técnico Frank Darío Kudelka.
Para los rosarinos fue una enorme victoria. Tan grande que asegura casi la salvación, que es la permanencia en primera. En una situación límite, extrema, antecedido por una derrota tras otra, visitó a Huracán preocupado y angustiado. Pero cambió las sensaciones negativas que lo embargaban por desahogo y alivio. Solo posible por un triunfo logrado sobre la base del compromiso y la practicidad. Para un 2 a 0 que lo dejó con un pie y medio en la primera división.
Salvo unas pocas jugadas en el inicio, en las que se le aproximaron por abajo, con Sequeira incomodando por el sector de Sosa, la visita opuso desde el inicio una estructura compacta. Cerró espacios hacia atrás y obligó a Huracán a recurrir a los pelotazos, facilitando los rechazos por arriba del fondo rojinegro. El primer objetivo se cumplió. El restante, referido al aspecto ofensivo, también. Cada recuperación proseguía con un ataque vertical, preferentemente por el centro, encontrando una débil resistencia de la defensa del local.
Tras un error defensivo de la última línea del Globo, llegó la apertura del marcador. Para darle alivio a los del sur santafesino y para el fastidio de la parcialidad "quemera" que está más que disconforme con el presente futbolístico que vive la entidad.
En menos de diez minutos, el primer gol llegó a los 27 minutos y nueva más tarde, hubo un envío alto de Espínola, otra desinteligencia de Huracán y "Cocoliso" González que la controló y empalmó de derecha para un 2 a 0 tranquilizador.
Newell’s continuó compenetrado en lo que debía hacer y jugó con la desesperación de Huracán durante toda la segunda etapa. Lo dejó avanzar y fue solidario en la contención, ocupando espacios y concentrado en las marcas. Parado así, con esta postura y convicción, consiguió que se le aproximen muy poco y sin riesgo.
Newell’s se aferró a los tres puntos y los obtuvo. Con el carácter que requería en un momento límite. Alcanza con la celebración de los futbolistas en el final para entender lo que se jugaba. Nada menos que ser de primera. En tanto, el Globo ahondó el mal momento y se fue silbado por una parcialidad por demás molesta por otra derrota