Boca inicia una semana decisiva rumbo a las semifinales del Torneo Clausura y, en medio de las dudas que dejó el triunfo ante Argentinos, Claudio Úbeda recibe una noticia que le mueve el tablero: Alan Velasco está de vuelta. El atacante, una de las apuestas más fuertes del club en el año y valuado en 11 millones, dejó atrás la distensión en la rodilla derecha que lo marginó desde la goleada frente a Newell’s del 5 de octubre y ya trabaja a la par del plantel.
Su regreso llega en un momento quirúrgico. Carlos Palacios terminó el último partido golpeado y lejos de su mejor versión, mientras que Ander Herrera también arrastra molestias. Si bien Velasco ya estaba en condiciones físicas de jugar ante Argentinos, el DT decidió preservarlo por su falta de ritmo. Ahora, con el alta definitiva y una semana completa de entrenamientos por delante, el ex-Independiente aparece como una alternativa real para el cruce frente a Racing.
La idea del cuerpo técnico es simple: llevarlo de a poco, sin riesgos, y probarlo en la práctica formal del jueves. Aunque parece difícil que ingrese desde el arranque se perdió los últimos siete partidos sí asoma como un recambio de peso para un duelo que promete ser áspero en la Bombonera.
En paralelo, Úbeda también deberá seguir de cerca otro frente: la presión creciente de Edinson Cavani. El Matador no termina de explotar, pero suma minutos, entrena fuerte y se mantiene al acecho. Con el bajo nivel de Milton Giménez, el uruguayo podría meterse definitivamente en la conversación para el cierre del Clausura.