La aventura de Horacio Zeballos en Wimbledon sigue sumando capítulos inolvidables. El marplatense, junto al español Marcel Granollers, volvió a mostrar su mejor versión y se metió en las semifinales del dobles tras derrotar en sets ajustadísimos a los británicos Neal Skupski y Joe Salisbury, sextos preclasificados, por un doble 7-6.
Fue un duelo sin quiebres, jugado al filo de la perfección. La pelota pesó, el césped se volvió una autopista de saques y cada error costaba caro. Pero en los momentos justos, la jerarquía y la sangre fría de la dupla hispano-argentina marcaron la diferencia.
El primer set se definió en un tiebreak muy apretado, que Zeballos y Granollers supieron resolver por 8-6 con oficio y temple. El segundo tuvo la misma historia: saques indescifrables, devoluciones milimétricas y cero margen de error. En el desempate, los cuartos favoritos fueron más certeros y se lo llevaron 7-3, sellando el pase a semis.
Ya instalados entre los cuatro mejores del torneo, la pareja se ilusiona con repetir la hazaña de Roland Garros, donde hace apenas unas semanas lograron levantar su primer trofeo de Grand Slam juntos. Van por el segundo al hilo, en la Catedral del tenis, y no quieren bajarse del sueño.
Con un nivel altísimo y una conexión que crece partido a partido, Zeballos y Granollers ya avisaron que no vinieron de paseo. Quieren todo.