Boca Juniors cortó su racha histórica de 12 partidos sin victorias con un 3-0 ante Independiente Rivadavia en el Estadio Malvinas Argentinas, pero el encuentro mostró también una situación inesperada que tuvo que ver con el cambio de Edinson Cavani. El delantero uruguayo, que desperdició una clara ocasión en la primera parte, le recriminó a Claudio Úbeda su salida tras ser reemplazado por Milton Giménez.
Promediando la segunda mitad, Miguel Ángel Russo decidió reemplazar a Cavani para refrescar el ataque. Cuando el Matador salió, las cámaras lo captaron cabizbajo al principio y, tras saludar a Giménez, quien ingresaba por él, se dirigió a Úbeda para cuestionarle la decisión, dejando en evidencia su malestar ante el cambio.
En la primera parte, el mal presente goleador del charrúa volvió a evidenciarse al desperdiciar una ocasión clarísima en el primer tiempo. Luego de un centro de Brian Aguirre, la pelota le pasó por debajo de la suela a un Cavani que llegaba libre por el segundo palo. Pese al tanto que marcó por Copa Argentina en el cotejo que Boca perdió ante Atlético Tucumán, la falta de gol y la evidente pérdida de confianza parecen perseguir al goleador.
En conferencia de prensa, Russo no se refirió a esta situación de Cavani, y declaró que no sintió que la victoria fuera un respaldo del plantel para con su continuidad luego de estar altamente cuestionado: “No lo sentí así. Nosotros estamos bien, venimos hablando mucho y es normal. Dialogamos cómo tenemos que hacer para crecer y los jugadores crezcan y compitan”, sostuvo el entrenador.
El episodio generó repercusión entre los hinchas, quienes también criticaron a otros jugadores como Palacios, pero el foco estuvo en el delantero uruguayo y su reacción. La polémica dejó en evidencia que, más allá del resultado, el mal momento de Cavani continúa y su actitud podría tener consecuencias internas en el Xeneize.