ESCÁNDALO INTENACIONAL
La trágica historia de Milagros, la exniñera de Lautaro Martínez
El jugador está en el centro de la polémica, luego de la condena por despedir a la niñera con una grave enfermedad.Lautaro Martínez fue condenado por la Justicia Laboral de Milán a pagar una indemnización a la familia de la difunta niñera, Milagros Lizzola, quien falleció poco después de ser despedida. La causa determinó que fue un acto ilegal y sin razones justificadas.
Sin embargo, tanto el jugador del Inter de Milán como su esposa, Agustina Gandolfo, rompieron el silencio y expresaron sus molestias ante la situación, explicando su versión de los hechos.
“Después de hacer mucho por ella y su familia, desde hacernos cargo de sus pasajes para que vengan, ayudar a encontrar camas en el hospital cuando estaba colapsado, ayudar con su tratamiento, con el alojamiento de su familia a la cual tuvimos que convencer para que vengan a cuidar a su hija que estaba muriendo”, sentenció Gandolfo.
Quién era Milagros Lizzola, la niñera de Lautaro Martínez
Milagros Lizzola nació en la región de Cuyo, en Mendoza, al igual que Agustina Gandolfo, la esposa de Lautaro Martínez. La joven, de tan solo 27 años, fue contratada como niñera para cuidar a Nina, la hija mayor del jugador de fútbol y su mujer. La relación entre Milagros y la familia Martínez no se limitaba solo al ámbito laboral; sino que ambas mujeres eran íntimas amigas.
La trágica historia comenzó cuando Milagros empezó a experimentar graves problemas de salud mientras trabajaba para la familia del futbolista. “Mili” vivía en la casa de Lautaro Martínez y Agustina Gandolfo, cuidando a la bebé, pero su bienestar se vio seriamente afectado por intensos dolores abdominales persistentes. Lamentablemente, Milagros fue diagnosticada con un cáncer terminal.
Asimismo, Milagros batalló contra la dura enfermedad durante meses, pero desafortunadamente, falleció a principios de año. Sin embargo, la familia de la joven inició una demanda contra Lautaro Martínez por considerar un “despido ilegítimo” mientras atravesaba un cuadro de salud sumamente complicado.