El presente mediático de Catalina Gorostidi dio un brusco giro en las últimas horas, luego de que su vivienda fuera allanada este viernes por la mañana en el marco de una investigación judicial. La ex participante de Gran Hermano enfrenta una compleja situación legal que podría impactar de lleno en su carrera como influencer.
Según trascendió, la medida fue ordenada por la fiscalía especializada en juegos de azar, a cargo del fiscal Juan Rozas, en el contexto de una causa que también involucra a su expareja, Joel Ojeda. Ambos estarían siendo investigados por la presunta promoción de plataformas de apuestas ilegales, un delito por el que Catalina Gorostidi fue formalmente imputada.
El periodista Mauro Szeta fue quien reveló la noticia a través de su cuenta de X (ex Twitter), donde detalló que Catalina Gorostidi fue imputada por seis hechos distintos. En su publicación, el especialista en policiales compartió además imágenes del operativo, en las que se observa la presencia de la Policía de la Ciudad y de personal de Lotería de la Ciudad.
Durante el procedimiento, los agentes secuestraron un teléfono celular y una agenda, elementos que serán analizados por la Justicia en busca de posibles pruebas que vinculen a la ex hermanita con la causa. Las imágenes difundidas muestran también la magnitud del operativo, con varios efectivos desplegados frente al domicilio de la influencer.
Hasta el momento, Catalina Gorostidi no realizó declaraciones públicas sobre lo ocurrido. Su silencio en redes sociales contrasta con su habitual actividad, especialmente en un contexto en el que venía mostrando su nueva relación sentimental tras la mediática ruptura con Joel Ojeda.
La causa que la involucra forma parte de una serie de investigaciones sobre la promoción de sitios de apuestas no autorizados, un tema que en los últimos meses generó gran preocupación en las autoridades. Diversas figuras públicas fueron señaladas por participar en estas campañas publicitarias, lo que derivó en sanciones e imputaciones.
Más allá de las consecuencias judiciales que pueda enfrentar, el impacto en su imagen es innegable. Las marcas con las que trabaja podrían tomar distancia ante el escándalo, lo que dejaría a la ex Gran Hermano en una posición delicada dentro del competitivo mundo de los influencers.
Por el momento, la investigación continúa su curso, mientras se esperan los resultados del análisis de los elementos secuestrados. Lo cierto es que el allanamiento marca un antes y un después en la vida pública de Catalina Gorostidi, que ahora deberá afrontar no sólo la exposición mediática, sino también el peso de la Justicia.