La sorpresiva confesión de Pampita Ardohain sobre sus condiciones para asistir al ciclo de Mario Pergolini encendió una polémica que creció como bola de nieve en la televisión local. Todo surgió cuando la modelo admitió, sin rodeos, que solo participaría del programa nocturno si le abonan un cachet previamente establecido, dejando desconcertados a colegas y espectadores.
El tema se disparó a partir de una consulta del periodista Nahuel Saa, quien quiso saber si Pampita aceptaría visitar el late night del ex CQC en medio del revuelo generado por la presencia de La China Suárez y Mauro Icardi. Fiel a su estilo frontal, la conductora respondió que tiene “un presupuesto” para entrevistas y que solo acude cuando se cumple esa condición, remarcando que prioriza quedarse en casa con sus hijos si no se justifica el desplazamiento.
Las palabras resonaron fuerte en Otro día perdido (El Trece), donde Mario Pergolini reaccionó con humor filoso y dejó entrever su sorpresa ante la postura de Ardohain. Junto a Agustín “Rada” Aristarán y Laila Roth, el conductor ironizó sobre el concepto de “presupuesto para ir a programas”, generando una cadena de chistes y chicanas sobre el supuesto monto solicitado.
Con risas de por medio, Mario Pergolini preguntó si alguien conocía la cifra concreta, mientras Rada, entre carcajadas, evitó revelarla pese a admitir que sí la sabía. El ida y vuelta derivó incluso en propuestas humorísticas para “hacer una vaquita” entre los integrantes del ciclo o “pasar la gorra” con tal de cumplir las condiciones de Pampita.
Pero la polémica no quedó ahí. En Sálvese quien pueda (América TV), Yanina Latorre disparó sin filtros contra la modelo, al afirmar que está “totalmente en contra” de cobrar por entrevistas. Para la panelista, cuando una figura es convocada como invitada, no corresponde exigir honorarios, postura que generó un intenso debate en el estudio.
En medio del análisis, Lizardo Ponce aportó una experiencia personal al recordar que Pampita también cobra para presentarse en streamings. Según relató, durante una temporada en Punta del Este se le ofreció participar en La Casa, y Ardohain habría respondido que estaba “trabajando” incluso en vacaciones, dejando claro su esquema profesional.
El capítulo económico llegó con Fede Popgold, quien explicó que ciertos valores, como los 10 mil dólares que mencionó como referencia, resultan difíciles de afrontar para medios sostenidos únicamente por pauta privada. Según su mirada, esos montos vuelven casi imposible rentabilizar una entrevista.
Para cerrar, Yanina Latorre reflexionó sobre las dinámicas actuales del espectáculo y aseguró que, cuando todo se vuelve tan comercial, “te volvés un poco fría”. La discusión, lejos de apagarse, reavivó un viejo interrogante: ¿cuánto vale realmente la presencia de una estrella en un programa?