El fútbol argentino despidió este martes a una de sus figuras más queridas: Juan Ramón “La Bruja” Verón, ídolo absoluto de Estudiantes de La Plata, falleció a los 81 años. La noticia provocó un profundo pesar en el mundo deportivo y especialmente en quienes compartieron momentos íntimos con él.
Entre los homenajes y muestras de cariño, uno de los mensajes más conmovedores llegó de parte de Agustina Amaro, su pareja y exjugadora del club platense. A través de una publicación en sus redes sociales, Amaro expresó con palabras cargadas de amor y dolor el vacío que deja su partida.
“Gracias por enseñarme lo que es el amor puro y bonito. Por ser mi amigo, mi compañero, mi confidente, mi cómplice, mi otra mitad. Te amo, te amo y te voy a amar hasta que nos volvamos a encontrar, amor de todas mis vidas”, escribió Agustina junto a una serie de fotos que retratan momentos compartidos con Juan Ramón “La Bruja” Verón.
La historia de amor entre Juan Ramón “La Bruja” Verón y Agustina Amaro sorprendió a muchos cuando se hizo pública, principalmente por la notable diferencia de edad: él tenía 80 y ella 30. Sin embargo, quienes los conocían sabían que el vínculo entre ellos era auténtico y estaba basado en el respeto y la admiración mutua.
Su relación comenzó años atrás, cuando Agustina Amaro formaba parte del equipo femenino de Estudiantes de La Plata. Allí fue donde conoció al histórico futbolista y padre de Juan Sebastián Verón. Con el tiempo, el compañerismo creció en cariño, y luego en una relación sólida que se mantuvo hasta los últimos días del ídolo.
A pesar de las críticas y la atención mediática, la pareja nunca ocultó su amor. Compartían salidas, momentos familiares y su pasión por el club que los unió. En cada imagen juntos se los veía felices, disfrutando de una relación marcada por la complicidad.
Hoy, la despedida duele. Pero las palabras de Agustina Amaro resumen el sentimiento de quienes lo amaron: un amor profundo, que trasciende el tiempo y la muerte. Su mensaje no solo es una carta de despedida, sino también un testimonio de una historia de amor inesperada y sincera.
Juan Ramón Verón dejó una huella imborrable en el fútbol y en los corazones de quienes lo rodearon. Y como lo expresó su compañera, su recuerdo vivirá más allá de la cancha: en el alma de quienes compartieron la vida con él.