Tras el escandaloso episodio ocurrido el pasado viernes en el Chateau Libertador, Mauro Icardi se reencontró con sus hijas y logró llevarlas a su casa en Nordelta para compartir unos días juntos, previo a que el futbolista viaje a Turquía.
En este contexto, y sabiendo que esta situación representa uno de los triunfos más importante de Icardi en la Justicia, muchos se preguntaron que haría su novia, la China Suárez, ya que el juez Adrián Hagopian había autorizado su presencia.
Es así que muchos esperaban que, aprovechando este permiso, la actriz volviera a instalarse en "La mansión de los sueños de Wanda", con el objetivo de hacer estallar a la empresaria, pero finalmente eso no pasó.
Según trascendió, las hijas de Icardi solo compartieron un almuerzo junto a la China durante el fin de semana, ya que la ex Teen Angels se quedó en su casa con sus hijos, para llevar adelante diferentes actividades.
Fue así que Yanina Latorre compartió detalles de cómo fue la esperada revinculación y destacó el buen comportamiento que tuvo la actriz frente a esta nueva oportunidad. Asimismo, dejó entrever que el que siempre insistió en que ella sea parte de la revinculación fue Icardi, a quien habría descripto como "pesadito".
“La nipona está cooperando. Hablaron con ella el sábado y le pidieron colaboración”, reveló la conductora de Sálvese quien pueda y sorprendió con su información: “Ella dejó entrever que el que es ‘pesadito’ es Mauriño… Él no se separa de ella ni a sol ni a sombra".
Según la conductora y panelista, todo estaría saliendo bien dentro de la revinculación: “De hecho, la nipona les dijo a los del Ministerio Público Tutelar que ella iba estar toda la semana en capital con sus hijos”.
Por último, durante la mañana de este martes, Latorre adelantó que todas las partes se estarían comportando y apostando por que la revinculación salga bien: “En el Ministerio Público Tutelar están asombrados con el cambio de Wanda. ¿Recapacitó o se asustó?”