El mundo del espectáculo llora la pérdida de Kelley Mack, actriz reconocida por su papel como Addy en la exitosa serie The Walking Dead. La noticia fue confirmada por su familia este miércoles 6 de agosto, a través de un comunicado conmovedor en sus redes sociales. “Una luz tan brillante y ferviente ha transitado al más allá, donde todos finalmente debemos ir”, escribió su hermana.
Kelley murió el sábado por la noche en su ciudad natal, Cincinnati, acompañada por su madre Kristen y su tía Karen. Según detallaron en la plataforma CaringBridge, la actriz falleció “pacíficamente”, luego de una intensa lucha contra un glioma del sistema nervioso central, un tipo de tumor cerebral agresivo que afecta también la médula espinal.
En enero de este año, Mack había compartido su diagnóstico con sus seguidores: glioma difuso de línea media (DMG), una forma de cáncer poco común que suele afectar a niños, pero que en su caso fue detectado luego de presentar fuertes dolores en la espalda y las piernas.
Kelley Mack, cuyo nombre real era Kelley Klebenow, tuvo una carrera que se forjó en el cine independiente y se consolidó con sus participaciones en televisión. Además de The Walking Dead, se destacó como Penélope Jacobs en la serie médica Chicago Med y también tuvo una aparición en 9-1-1, de Fox. Fuera de la actuación, también se desempeñó como productora y modelo publicitaria.
Nacida el 10 de julio de 1992, Mack estudió cinematografía en Chapman University, en California, tras graduarse de la Hinsdale Central High School. Su debut fue en el cortometraje The Elephant Garden y desde entonces construyó una trayectoria que la llevó a ser parte de una de las franquicias televisivas más exitosas de la última década.
Quienes la conocieron destacan su calidez, sensibilidad y compromiso artístico. Su familia contó que, tras su partida, varios allegados sintieron su presencia a través de mariposas, símbolo de transformación y libertad. “La echaremos de menos tanto hasta las profundidades que las palabras no pueden expresar”, escribió su hermana.
Los restos de Kelley serán despedidos el próximo 16 de agosto en Ohio, en una ceremonia íntima para familia y allegados con el fin de celebrar su vida y despedirse. Con solo 33 años, dejó una huella imborrable en sus colegas, amigos y fanáticos, que hoy la recuerdan no solo por sus papeles, sino por la luz que irradiaba dentro y fuera del set