El papa León XIV celebró la primera misa de Navidad de su pontificado en la basílica de San Pedro en el Vaticano, donde envió un mensaje de "caridad y esperanza". Poco antes de la misa, el papa estadounidense salió a la plaza de San Pedro para saludar a unos 5.000 fieles congregados bajo la lluvia para ver la ceremonia en pantallas gigantes, por falta de espacio en el interior de la basílica.
"La basílica de San Pedro es muy grande, pero desgraciadamente no lo suficiente para recibirlos a todos. Los admiro y respeto, y les agradezco por su coraje y el deseo de estar aquí esta noche", dijo en inglés. Ante los cardenales, obispos, diplomáticos y unos 6.000 fieles, León XIV, que muestra un estilo más discreto que su predecesor Francisco, pronunció luego una homilía muy religiosa sin mencionar directamente temas de actualidad.
"Cuando una economía distorsionada lleva a tratar los hombres como mercancías, Dios se hace semejante a nosotros, revelando la dignidad infinita de cualquier persona", declaró el papa. "Proclamamos la felicidad de Navidad, que es la fiesta de la fe, la caridad y la esperanza", agregó.
Esta ceremonia que conmemora el nacimiento de Cristo, una de las más solemnes del año, mezcló cantos tradicionales y gestos simbólicos. El papa, de 70 años, decidió celebrarla a una hora más tardía que durante el pontificado de Francisco.
Otro cambio es que León XIV presidió la misa del día del natalicio de Jesús, reanudando con una tradición que se remonta al pontificado de Juan Pablo II (1978-2005). Luego pronunció su bendición "Urbi et Orbi" (a la ciudad y al mundo) desde el balcón de la basílica, en la que el papa se refiere a los conflictos en el mundo. León XIV leyó en italiano su mensaje que tuvo a la paz como el eje central. Comenzó con un saludo muy particular a los pueblos de Medio Oriente y dijo que pudo ver personalmente las privaciones y esperanzas - al mismo tiempo - por las que están atravesando desde hace años. Nombró puntualmente a Palestina y también a Israel y expresó: "Practicar la paz les dará justicia".
Después hizo una mención muy importante para el centro de Europa. "Recemos de manera especial por el martirizado pueblo ucraniano", dijo y pidió que cese el fragor de las armas y que la comunidad internacional halle definitivamente el camino de la negociación para la paz.
Fuentes: afp, efe, ap