Después del atentado contra la vicepresidente, Cristina Fernández de Kirchner, habló - por primera vez - el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. Se supo, esta mañana, que había puesto a disposición su renuncia. El presidente, Alberto Fernández, ratificó su cargo.
"Yo soy un caballero y cuando esta cosa sucedió, lo primero que le dije al Presidente es que estaba dispuesto, cuando él lo decidiera, a correrme del cargo”, expresó. Además, con respecto al "reseteo" que sufrió el teléfono celular de Fernando Sabag Montiel, dijo que la Policía Federal “no manipuló” el celular, sino que simplemente participó de la cadena de custodia, hasta que el mismo llegara al juzgado. Según relató, los efectivos que incautaron el móvil se limitaron a guardarlo en una bolsa “faraday” -crean un campo electromagnético para que no se pueda acceder remotamente- y entregárselo a la Justicia.
El funcionario fue criticado luego de que Fernando Sabag Montiel llegara hasta el lugar en el que se encontraba la Vicepresidente y le gatillara con un arma a centímetros de su cabeza. Y, en ese contexto, Aníbal Fernández aseguró que “los protocolos se han cumplido correctamente”, por parte de la Policía Federal, durante el operativo de custodia.