El ministro de Economía Luis Caputo acumula más poder dentro del Gabinete de Javier Milei, ya que el libertario firmará en los próximos días un decreto para que el manejo de los fondos fiduciarios queden dentro de su órbita. Esto surge en medio de la pelea con las provincias por las deudas de Nación por los distintos fideicomisos, cuyo dinero se transfiere por fuera del Presupuesto anual aprobado por el Congreso.
El propio Milei argumentó en una entrevista televisiva que estas herramientas son "todas cajas negras de la política" con las que hay que terminar, hecho que "pone muy nerviosos a muchos agentes de la política que viven de eso". Según el periodista Federico Galligani, se realizó una auditoría en la que se descubrió que hay "más de los 30 que se dijeron en un comienzo", y que las autoridades nacionales ahora planean cómo desarmarlos.
En principio, Milei pensó en eliminarlos de un saque pero su equipo verificó que serían solo nueve los fideicomisos que podían desaparecer con su firma, y que para el resto necesitaría hacerlo a través de una ley. Según el colega, en la Rosada también reconocieron que es muy difícil terminar con estos financiamientos que sirven, por ejemplo, para obras de infraestructura que ya están en pleno desarrollo y con contratos vigentes con varias empresas.
De esta manera, la decisión del presidente fue darle la vuelta al asunto y, como hizo con el Ministerio de Infraestructura, lo dejará en manos del ministro de Economía Caputo. Según Galligani, esto se logrará Decreto mediante que se publicará en el Boletín Oficial, y el mismo establecerá que la cartera de Economía será fiduciaria de todos los fondos existentes, y deberá cumplir con los términos establecidos en los contratos originales.
Otra variable que ya despertó repercusiones en la política es que, con esta metodología, se les quitará el poder de decisión sobre el dinero a los actuales fiduciarios, que generalmente son los vicegobernadores/as o funcionarios de las provincias beneficiadas, para que la decisión la tome Caputo.