Con el período parlamentario llegando a su fin y a días del recambio legislativo, Unión por la Patria (UxP) intenta forzar una última sesión ordinaria para tratar proyectos que incomodan al oficialismo. En La Libertad Avanza (LLA), en cambio, consideran que el año legislativo ya está cerrado y trabajan directamente en el paquete de extraordinarias que el Gobierno convocará en diciembre.
Para el peronismo, esta instancia final tiene un valor doble: despedir a los diputados que dejarán sus bancas y, si logran reunir el quórum, aprobar algún proyecto antes de que Javier Milei pueda vetarlo. A partir del 10 de diciembre, con una nueva distribución de fuerzas, revertir un veto presidencial será casi imposible.
El reordenamiento interno será determinante. La alianza parlamentaria que permitió alcanzar los 129 votos durante el último año —UxP, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, la Coalición Cívica y el Frente de Izquierda— está a punto de disolverse. Simultáneamente, LLA crecerá en ambas cámaras y aspira a arrebatarle a UxP el rol de primera minoría. Martín Menem, presidente de Diputados, ya concentra sus esfuerzos en asegurar lugares clave en las comisiones.
En paralelo, los gobernadores avanzan con cautela. En las reuniones con el ministro del Interior, Diego Santilli, piden definiciones concretas antes de garantizar su apoyo: nuevas reglas para los ATN, un esquema actualizado para el impuesto a los combustibles y certezas sobre los fondos para obras públicas que esperan incluir en el Presupuesto 2026.
En el Senado, el jefe del bloque de UxP, José Mayans, todavía evalúa insistir con una sesión esta semana luego del fracaso de la anterior. Aspira a avanzar con la modificación de la ley de DNU, una propuesta que irrita al oficialismo. La UCR, sin embargo, presiona para priorizar otra disputa clave: la elección de los próximos miembros de la Auditoría General de la Nación (AGN).
Con la composición actual, el reparto beneficiaría a UxP y a los radicales. Pero a partir de diciembre, cuando LLA pase de seis a veinte senadores, el panorama cambiará por completo. Por eso la UCR quiere sellar ahora la designación de Víctor Zimmermann o Luis Naidenoff para no quedar afuera del organismo de control.
También podría regresar al recinto la modificación a la Ley de ATN, ya aprobada en el Senado pero frenada en Diputados por un artículo polémico. Si UxP logra sumar a senadores críticos del oficialismo, como Martín Lousteau, Pablo Blanco o Guadalupe Tagliaferri, podría acercarse a la mayoría absoluta. Aun así, todo indica que Milei vetaría la iniciativa para mantener intactas sus facultades sobre los DNU.
Por ahora, la única sesión confirmada en la Cámara alta es la del viernes 28 de noviembre, destinada a la jura de los senadores electos.
En Diputados, el jefe de UxP, Germán Martínez, lleva semanas intentando construir mayorías para una sesión que funcione como despedida del cuerpo legislativo y permita tratar temas pendientes. Entre ellos, la autarquía financiera del ENARD, un reclamo histórico del deporte de alto rendimiento para recuperar un mecanismo de financiamiento perdido en 2017.
Los números, sin embargo, no están del lado de la oposición. Encuentro Federal admite las dificultades y Democracia para Siempre aún no fija posición. Además, el pedido de sesión todavía no ingresó formalmente, un paso indispensable para que Menem pueda convocar.
Mientras tanto, el presidente de la Cámara ya fijó para el 3 de diciembre la sesión preparatoria en la que jurarán los nuevos diputados y se elegirán autoridades. Ese día, Martín Menem será reelecto, consolidando el control libertario del cuerpo legislativo de cara a un 2026 que promete una nueva etapa de tensión política.