La Justicia Federal de La Plata procesó a Ariel García Furfaro, titular de HLB Pharma y Ramallo S.A., por la muerte de 96 pacientes que recibieron fentanilo adulterado. El juez Ernesto Kreplak lo consideró coautor responsable de adulteración de sustancias medicinales con resultado fatal, delito que prevé hasta 25 años de prisión, y dispuso un embargo de un billón de pesos.
También fueron procesados su madre Nilda y su hermano Diego, ambos con prisión preventiva y embargos por 500 mil millones de pesos cada uno.
Un informe del Instituto Malbrán fue clave en la investigación: detectó fallas críticas en el sellado de ampollas, controles de calidad deficientes y la presencia de bacterias letales como Klebsiella pneumoniae y Ralstonia mannitolilytica, halladas también en los pacientes afectados.
Furfaro ya contaba con antecedentes penales y además enfrenta una causa por contrabando agravado tras falsear declaraciones aduaneras en una importación desde China.
La investigación se perfila como una de las más graves contra la industria farmacéutica en el país.