ELECCIONES 2025
Milei movió a su favor en Buenos Aires: Qué puede pasar en Neuquén
El intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, dejó el PRO y se unió a La Libertad Avanza.Es una jugada que se preveía, pero que igual impacta en el contexto nacional, el pase de Diego Valenzuela del PRO a La Libertad Avanza. Obviamente, cambia el equilibrio en la provincia de Buenos Aires, en el estratégico Conurbano, en lo que hace a las tensas negociaciones entre el partido conducido por Mauricio Macri, y el oficialismo conducido, en estas cuestiones electorales y estratégicas, por Karina Milei, la todavía enigmática hermana del presidente Javier.
Valenzuela es un viejo conocido del Presidente, desde épocas universitarias. El intendente de 3 de Febrero tiene una trayectoria singular en la política. Es periodista -trabajó con Mariano Grondona- e historiador. Su formación intelectual lo hace un rara avis en el despiadado mundo del Conurbano. Es, además, bastante popular en su distrito, y su gestión ha sido interesante. Esto implica que el pase del PRO a LLA repercute fuertemente, no pasará como algo pequeño; y agigante a su vez la movida estratégica del oficialismo, en los aprontes de una negociación formal para, eventualmente, discutir un programa y acordar ir juntos en las elecciones parlamentarias de este año.
El poroto anotado para el oficialismo en esta partida de truco en la que todos mienten un poco, sugiere lo que habíamos anticipado, que la singularidad en cada distrito es lo que determinará la suerte del acuerdo nacional; pues cada distrito político del país tiene sus propios intereses y conveniencias.
El oficialismo tiene las de ganar en este aspecto, pues no debe olvidarse que conduce el gobierno nacional y el actual proceso económico, con mano de hierro. Es esa firmeza la que le otorga mayor poder de fuego, pese a no tener distribución de fuerzas en el territorio, por estar en construcción, ya que el fenómeno político que ha vivido Argentina es precisamente ese: ganó una fuerza entonces mínima, que ahora pretende agrandarse.
Si se observa el distrito neuquino, se verá que hay singularidades fuertes. Aquí realmente no parece interesar una unidad entre el PRO y LLA, por lo menos desde el PRO, pues se ha jugado muy fuertemente bajo el paraguas de la "neuquinidad" de Figueroa. Si bien la elección es nacional y no provincial, la carga que el oficialismo neuquino le pone es, precisamente, de fuerte tono localista, porque a Figueroa le importa, y mucho, marcar la cancha en las próximas parlamentarias.
Por eso, juegan o jugarán los nombres propios. Como el caso de Valenzuela en Buenos Aires, en Neuquén habrá que mirar más a las personas que a los partidos, para evaluar cómo se armará el escenario apuntando a octubre.