Una fuerte interna se desató en el Gobierno a partir de una decisión que impacta de lleno en las estadísticas oficiales de turismo. La Secretaría de Turismo y Ambiente resolvió dar de baja un convenio histórico con el INDEC, vigente desde hace más de dos décadas, que servía para medir el movimiento turístico y el gasto de los visitantes que llegan al país.
La medida fue impulsada por Daniel Scioli, quien cuestiona la metodología y los resultados de las mediciones actuales, en especial los datos vinculados al ingreso de dólares que dejan los turistas extranjeros en la Argentina. Desde la Secretaría sostienen que los números no reflejan la realidad del sector y anticipan que trabajan en un índice propio, elaborado a partir de información del Banco Central, Migraciones y la Cámara Argentina de Turismo, que podría comenzar a difundirse a partir de enero.
El convenio discontinuado implicaba una inversión anual cercana a 600 millones de pesos y financiaba el informe de Estadísticas de Turismo Internacional, uno de los relevamientos clave del sector. La decisión fue comunicada en un encuentro entre Scioli y el jefe de Gabinete, donde quedó claro que el acuerdo no será renovado.
Del otro lado, en el INDEC no comparten la mirada de la Secretaría. En el organismo que conduce Marco Lavagna consideran que los cuestionamientos responden al descontento con los resultados y no con la calidad técnica de los informes. De hecho, fuentes del instituto deslizaron que la incomodidad estaría en los números que se difunden y no en cómo se construyen.
En un comunicado oficial, el INDEC confirmó que la falta de renovación del convenio traerá cambios a partir de enero de 2026, tanto en la forma como en la frecuencia con la que se publicarán los datos. Aclararon que las estadísticas basadas en los registros migratorios no se modificarán, pero sí se reformularán encuestas clave, como la de Turismo Internacional y la de Ocupación Hotelera, lo que obligará a reprogramar su difusión.
Pese a la tensión, desde el organismo estadístico aseguran que la información sobre turismo no se perderá. Lavagna impulsa acuerdos con las provincias para sostener la recolección de datos y garantizar la continuidad de las estadísticas, mientras el Gobierno avanza hacia un escenario con dos miradas distintas sobre el mismo sector, en medio de una pulseada política y técnica que promete nuevos capítulos.