Crisis petrolera
YPF: “barajar y dar de nuevo”
Una semana de definiciones: YPF transfierió a las empresas de servicios para abonar los sueldos. El gremio advirtio y comenzó a recorrer los yacimientos. Mientras tanto se bajaron 14 equipos de torre.
La semana pasada cerró con una advertencia del Sindicato de Petroleo y Gas Privado de Neuquén, Río Negro y La Pampa que finalizaban las “guardias mínimas”. Para reforzar el mensaje, este fin de semana, Marcelo Rucci y Daniel Andersch recorrieron los yacimientos.
Todo un despliegue simbólico luego de la video conferencia que Guillermo Pereyra mantuvo con los referentes de las cámaras locales. Mientras YPF materializaba los pagos en las cuentas de los contratistas, varias empresas de servicios comunicaran vía redes sociales y grupos de WhatsApp que cerraban definitivamente sus operaciones.
La estrategia que intentó implementar YPF con las PYMES regionales no dio el resultado esperado. La empresa presidida por Guillermo Nielsen y conducida por Sergio Affronti orientó sus esfuerzos en el “que hacer” dejando de lado el impacto político y social.
El viernes el gremio fue claro con los empresarios, “si cobraron no hay excusas, tienen que pagar”. La realidad es que el pago atrasado dio oxígeno a las empresas locales para abonar (esta semana) los salarios adeudados. Luego de la reunión con las cámaras locales, Pereyra envió la nota a los medios informando que “el plazo para normalizar los salarios de abril y mayo vence el próximo martes a las 20 horas”.
Según trascendió, luego de las duras críticas de todas las cámaras empresarias (CEOPE, FECENE, CASEPE), YPF implementó una nueva estrategia que comenzó con la transferencia de los pagos adeudados y la convocatoria -para esta semana- a discutir los contratos preexistentes con cada empresa en particular.
“La propuesta que ofrecieron fue abonar los meses de enero y febrero en su totalidad, y para los servicios prestados durante marzo, abril y mayo se deberá pactar una quita entre el 20% y 40% de lo efectivamente facturado” comentó insatisfecho el empresario local.
Como dijo un viejo petrolero, “YPF se dio cuenta que no se puede preparar una buena cena con malos ingredientes; entonces, comenzó a barajar y dar de nuevo.”
El lineamiento comunicado desde el edificio de Puerto Madero fue similar para todas las empresas. Aunque existen variables que predicen mayor impacto según el lugar de radicación o prestación de servicio.
Para la CASEPE -Cámara de Servicios Empresarios de Río Negro- el vínculo está relacionado directamente con la operación en los yacimientos; es decir, para la mayoría de las empresas asociadas a la entidad, el análisis pasa por definir la estructura de costos y achicar el sobredimensionamiento de los servicios que fueron producto de las necesidades operativas.
En cambio, para la FECENE -Federación de Cámaras del Sector Energético de Neuquén-, la mayoría de los contratos están atados a las empresas de servicios especiales, que también vieron recortada su rentabilidad y su cadena de pago.
Es aquí donde se centra el nudo del conflicto. Al parecer, la empresa de bandera tiene algunas diferencias con alguna empresa de servicios especiales que se le atribuye a la supuesta falta de acompañamiento en este delicado contexto.
Lo cierto es que mientras funcionarios de YPF comunicaba a las empresas regionales la intención de comenzar este mes con los trabajos en los yacimientos; por otro lado, se conocía que desde el edificio de Puerto Madero se enviaba una orden de servicios desafectando 14 equipos de perforación a la principal empresa de torres del país.
Es decir que esta semana; tanto YPF como San Antonio deberán analizar junto a los gremios petroleros cuál será el destino de los más de 3000 empleados directos que tiene la empresa de torre; para luego considerar, el impacto que esta decisión tiene en las empresas asociadas a la FECENE.
Mientras tanto, lo que se dice es que YPF está instrumentando un cambio en la modalidad de contratación de los servicios. Su implementación -según comentaron- persigue bajar costos operativos que incluiría tanto cambios en el modelo de control de auditoría externa como en la matriz de riesgos.
Un tema que -seguramente- traerá mucho ruido. Para los especialistas, la reducción del costo operativo conduce a incrementar la matriz de riesgo, potenciando los accidentes laborales y/o incidentes ambientales. Situación que fue expuesta recientemente por el gremio petrolero en la nota del pasado viernes.
