Más allá de los dolores de cabeza para los conductores que deberán ir al chapista, el triple choque ocurrido esta mañana temprano en Neuquén generó polémica porque, todo indica, no se cumplieron con los pasos requeridos, en este tipo de hechos, por parte de los policías que intervinieron.
Bien temprano, en el semáforo de Entre Ríos e Islas Malvinas, un costoso Audi TT chocó por detrás a un Suzuki Fun y éste golpeó a un Chevrolet.
Como consecuencia del choque en cadena, una mujer de unos 40 años sufrió el golpe de su cráneo contra el parabrisas.
Pocos minutos después, llegaron al lugar efectivos policiales de Tránsito y del municipio.
El clima comenzó a enrarecerse porque los uniformados no quisieron proceder a la realización de los peritajes -que en caso de personas heridas o golpeadas deber hacerse-. Los conductores del Chevrolet y del Suzuki lo reclamaron enérgicamente, pero no tuvieron respuestas.
Encima, observaron que quien manejaba el Audi se encontraba en un estado al menos curioso. Pidieron que le hagan la prueba del narcotest, pero la respuesta también fue negativa porque no se contaban con los elementos correspondientes.
Como si todo eso fuera poco, no llevaba consigo ni la documentación del auto, ni del seguro y ni siquiera su licencia de conducir. Pese a todas esas irregularidades, le permitieron seguir su camino.
El director de tránsito de la Municipalidad de Neuquén, Facundo Churrarin, afirmó que: “al conductor del Audi TT se le realizó el control de alcoholemia y dio negativo”.
A su vez el funcionario remarcó que: “al momento de un siniestro, si hay personas heridas de gravedad, interviene solo la policía y se le realizan los controles pertinentes al conductor que cometió el choque. De lo contrario no intervienen y solo lo arreglan las partes con sus respectivos seguros”.