LO CORTÓ EN LA PANZA Y LOS BRAZOS

Intentó calmar a un machirulo y terminó apuñalado

El atacante agredía verbalmente a su mujer y la víctima intentó interceder para que termine con el maltrato.
domingo, 15 de noviembre de 2020 · 00:00

Luego de tanto tiempo de encierro, un hombre con su compañera decidió invitar a cena a una pareja amiga, siempre manteniendo la distancia recomendada. Pero el rato ameno se fue transformando en una velada para el olvido que terminó con el dueño de casa atendido por una ambulancia por las puñaladas sufridas en distintas partes del cuerpo.

La cena entre las parejas transcurría sin inconvenientes, dentro de una casa del barrio Lavalle de Bariloche. Pero el alcohol sacó a relucir la personalidad violenta del otro hombre, quien comenzó a maltratar a su pareja. Según lo que comentaron fuentes allegadas a la causa, en un primer momento el trato hacia la mujer comenzó a ser agresivo y a los gritos.

Ante la difícil e incomoda situación, el dueño de casa intentó intermediar, para que la cena termine de la mejor manera y sobretodo para resguardar a la mujer, quien manifestaba su nerviosismo por los permanentes ataques de su pareja. La actitud conciliadora del hombre fue lo que más alteró al machirulo, quien no pudo soportar quedar en evidencia.

De acuerdo a lo que figura en la denuncia, el hombre se enardeció aún más, pero ahora como blanco de sus ataques puso al dueño de casa. En medio de la discusión, fue hasta la cocina y agarró un cuchillo. Con el arma blanca en la mano comenzó a perseguir al hombre hasta que lo encerró en una habitación.

Allí, el ataque verbal quedó de lado y se mostró capaz de utilizar ese cuchillo con el que amenazaba atacar. En medio de la desesperación por defenderse, el dueño de casa interpuso sus brazos y fue en ese sector donde presentó la mayor cantidad de heridas. También recibió una puñalada en el abdomen.

A esa altura el caos era terrible, y sin saber de qué podría ser capaz su invitado a cenar, alcanzó a arrojarle algunos juguetes de sus hijos que estaban tirados en la habitación, eso le dio unos metros necesarios como para poder escapar y pedir ayuda. Junto con los médicos llegó la Policía, pero el atacante ya no estaba en el domicilio.

En el hospital le realizaron las curaciones correspondientes a la víctima y se certificaron los cortes en los brazos y el abdomen, aunque todas las heridas eran de carácter leve y no afectaron órganos vitales.

 

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