El 24 de abril pasado, Héctor Barroso, dejó el penal de Batán luego de permanecer 15 años detenido en una condena que en principio había sido a 30 años y luego reducida a 25. El almacenero, fue condenado en Mar del Plata, en agosto de 2004 por mandar a matar a dos jóvenes y debía cumplir su codena hasta el 1° de diciembre de 2029.
Barroso, le pidió en aquel entonces, a su amigo -ex boxeador- Juan Carlos Sánchez Gaspio que matara a Verónica Juárez, quien se había convertido en su amante.
Veronica "desapareció" durante muchos meses, hasta que Barroso fue detenido por el asesinato de otra mujer, Analía Fuschini, a la que contrataba para tener sexo. La ex pareja de Sánchez Gaspio contó que éste le había confesado sobre el destino del cadáver de Juárez. Al día siguiente de esa declaración, el cuerpo fue recuperado: estaba en el fondo del pozo ciego de la casa del boxeador.
En noviembre de 2017, Barroso obtuvo salidas transitorias por 8 horas bimestrales, el primer domingo de cada mes. En junio de 2018 se le ampliaron las salidas transitorias bajo palabra de honor y un año después fue incorporado al régimen de semi-libertad para realizar tareas laborales bajo la supervisión de su esposa. También le otorgaron salidas transitorias semanales para afianzar los vínculos familiares.
Hoy, Héctor Julián Barroso, está en su casa de siempre, del barrio Parque Palermo. Tiene 62 años y va a cumplir lo que le resta de condena en esas condiciones de encierro ya que la Justicia marplatense entendió que al ser hipertenso está dentro del grupo de riego. Además tiene buena conducta penitenciaria, motivos que, al parecer, fueron suficientes para recibir beneficios de libertad anticipada y prisión domiciliaria.
Su esposa fue la persona que firmó el acuerdo y asumió el rol de tutora para que Barroso pudiera dejar el penal. Lo controlarán por medio de videollamadas.