La tiró del techo, le fracturó la pelvis y luego la violó

En una audiencia de formulación de cargos realizada este miércoles por la tarde, la fiscal del caso Carolina Mauri acusó a un hombre, por amenazar, golpear brutalmente y abusar sexualmente de su ex pareja, en la ciudad de Plottier. La funcionaria de la fiscalía detalló ante el juez de garantías que los hechos atribuidos al imputado, se cometieron en un contexto de extrema violencia de género.

Los delitos que la representante del Ministerio Público Fiscal le atribuyó al acusado son amenazas coactivas, lesiones leves calificadas por el vínculo y por la violencia de género y abuso sexual con acceso carnal, todo ello en concurso real y en carácter de autor. 

De acuerdo a la investigación que la fiscalía viene realizando en conjunto con la policía de Neuquén, los hechos ocurrieron en la ciudad de Plottier entre la noche del viernes 10 y el domingo 12 de agosto. Cerca de las 23 del viernes, la víctima caminaba hacia la casa de una clienta y metros antes de llegar, fue interceptada por J.A.A, que detuvo su moto y le reclamó no atenderle el celular, tras lo cual la amenazó con un arma de fuego y la obligó a subir al vehículo. Posteriormente, el imputado fue hasta su casa y una vez allí, llevó a la mujer hacia la habitación.

En ese lugar y cerca de las 23:30, el imputado agredió físicamente a su expareja. La mujer en su intento por defenderse salió a un patio delantero y, al ver que el portón de ingreso al domicilio estaba cerrado, trepó al techo utilizando unas rejas. El acusado subió detrás de ella y, estando arriba del techo, forcejeó con la víctima y la arrojó al suelo, provocándole la fractura de la pelvis. Luego descendió, la recogió del piso, la llevó cargando a su habitación, donde volvió a agredirla físicamente y además la abusó sexualmente. Luego de cometer los abusos, el imputado le suministró analgésicos por lo que la mujer se durmió y despertó el domingo 12 de agosto. Debido al dolor que tenía en la pelvis, el imputado y su madre la trasladaron al Hospital de Plottier, donde fue atendida.

La fiscal Mauri expresó que posterior al hecho, se asignó una tobillera electrónica que alerta a la víctima respecto de la cercanía del acusado. Además de esta medida y con el objetivo de proteger a la víctima, la fiscal del caso requirió que el imputado permanezca detenido con prisión domiciliaria por cuatro meses. La defensa no se opuso.

El juez de garantías que intervino en la audiencia hizo lugar al requerimiento de la fiscalía en todos sus términos y dio por formulados los cargos. Además, el magistrado avaló la medida de coerción solicitada y fijó la prisión domiciliaria por cuatro meses. Finalmente estableció el plazo para concluir la investigación en dos meses.