Esta jornada comenzó el juicio contra Ítalo Fernández, el mecánico acusado de matar de una puñalada a Sergio Raúl Matus el 10 de febrero de este año. El mismo comenzó con el alegato del Ministerio Público Fiscal, en el que la fiscal Lucrecia Sola y la asistente letrada Guadalupe Inaudi adelantaron que pedirán la pena por homicidio simple en calidad de autor.
Sola afirmó que con los testimonios de testigos presenciales, del personal policial, más los registros fílmicos y peritos, la autoría de Fernández en el crimen quedará acreditada: “No es un caso difícil de probar. Hay cámaras que registraron los momentos previos al hecho, el momento preciso y el desvanecimiento de la víctima”, remarcó.
Además, la fiscalía informó que en este hecho había otro imputado por encubrimiento, pero que resolvió su situación procesal en otra audiencia al descartarse su "intervención en el hecho".
Cómo fue el homicidio
El crimen de Matus sucedió el 10 de febrero de 2023 cerca de las 11 de la mañana, a metros del taller mecánico al que la víctima había llevado su vehículo, en la esquina de Remigio Bosch y Pasteur del barrio neuquino Don Bosco.
Matus arribó al lugar en un auto junto a una de sus hermanas y su cuñado, para retirar por su cuenta un rodado que habían dejado para su reparación un mes atrás. Decidieron ir ya que advirtieron que ese vehículo estaba "desmantelado y permanecía estacionado en la calle", y "por eso decidieron remolcarlo".
Al alertar la situación, Ítalo Fernández salió de su casa –contigua al taller mecánico– con un cuchillo en su mano y acompañado de otras personas, entre las que estaba G. A. R, imputado por encubrimiento de ese hecho.
Tras una enardecida discusión con Sergio Matus y sus familiares, Fernández los amenazó y luego "le dio una puñalada en el pecho a Matus, quien murió horas después en el hospital Castro Rendón". El informe señala que "tras la agresión, el acusado escapó en el auto que estaba en el lugar, rumbo a una chacra de Senillosa, donde fue detenido al día siguiente".