Un brutal ataque ocurrió en la noche del lunes 23 de septiembre en José C. Paz, Buenos Aires, cuando un grupo de delincuentes abordó un colectivo para robarle al conductor. En medio del asalto, los agresores atacaron al chofer con un machete, cortándole tres dedos, lo que generó conmoción y el inmediato inicio de un paro de la compañía de transporte afectada.
El hecho sucedió cerca de la medianoche, cuando el colectivero realizaba el último recorrido del día. Mientras transitaba por una calle desierta, tres personas se interpusieron en el camino, obligando al conductor a detenerse para evitar atropellarlos.
Apenas el chofer frenó, los delincuentes subieron al colectivo y lo golpearon violentamente. Según relató un compañero de la víctima, “le robaron el teléfono y las pertenencias que tenía, no le dieron tiempo a resistirse. Lo golpearon en la cara, le dejaron el ojo y la nariz mal. Después, con un machete, le cortaron los dedos”. El ataque fue feroz y dejó al conductor gravemente herido y en estado de shock.
Los asaltantes, armados con un machete, un arma de fuego y un cuchillo, escaparon tras el ataque. Un delegado de la empresa reveló que este no es el primer caso en esa zona. “Ya hubo otro episodio similar, también le cortaron los dedos a un chofer en ese mismo lugar”, expresó preocupado por la creciente inseguridad que enfrentan los conductores.
El ataque ocurrió en una jornada muy significativa: el Día del Colectivero. El hecho agravó aún más la indignación del personal de la empresa, quienes decidieron parar las actividades en señal de protesta, exigiendo medidas de seguridad que protejan tanto a los trabajadores como a los pasajeros.
Uno de los compañeros del chofer asaltado explicó que la víctima no debía haber estado en ese recorrido esa noche. “Por cosas del destino tuvo que ir él”, dijo conmovido.
El violento hecho reavivó el reclamo por mayor seguridad en las rutas y calles de la región. "Nunca pasó algo tan grave en nuestra empresa y no queremos que vuelva a pasar", expresó uno de los delegados. "Queremos que los choferes puedan trabajar tranquilos sin temer por sus vidas cada vez que salen a hacer su recorrido".
Mientras tanto, el chofer permanece internado recuperándose de sus heridas, mientras la policía busca intensamente a los responsables del ataque.