Un hombre que atacó violentamente a un inspector municipal de tránsito en pleno centro de la ciudad neuquina deberá pagar una indemnización millonaria por los daños físicos, morales y económicos causados a la víctima. Así lo resolvió el juez civil Martín Peliquero, quien dictó sentencia en un fallo que remarca la gravedad de la agresión y la obligación de reparar sus consecuencias.
El hecho ocurrió cuando el inspector, junto a dos compañeros, se dirigía desde la oficina ubicada en calle Córdoba al 600 hacia una camioneta estacionada en Diagonal España. En ese trayecto fue interceptado por un sujeto que, tras una discusión verbal, lo empujó varias veces y, al darse la víctima vuelta para retirarse, lo golpeó por la espalda con un puñetazo en la cabeza. El impacto lo dejó inconsciente y convulsionando en el suelo.
Lejos de cesar el ataque, el agresor continuó la violencia con patadas en las costillas mientras el inspector yacía en el piso. A raíz de las lesiones, la víctima fue internada de urgencia en la Unidad de Terapia Intensiva del Policlínico Neuquén, donde permaneció cinco días. Luego continuó su recuperación en sala general y debió guardar reposo laboral durante dos meses.
En el fuero penal, el agresor fue beneficiado con una suspensión de juicio a prueba por el término de un año, una figura que evita la condena penal si se cumplen ciertas condiciones. Sin embargo, en sede civil, el juez Peliquero determinó que el autor del hecho deberá resarcir económicamente a la víctima por los perjuicios ocasionados.
“El resarcimiento de daños consistirá en la reposición de las cosas a su estado anterior, excepto que fuera imposible, en cuyo caso la indemnización se fija en dinero”, expresó el magistrado en su fallo.
La condena incluye el daño físico, los gastos médicos y de farmacia, el lucro cesante por la imposibilidad de realizar horas extras durante la recuperación, y una compensación por daño moral, en la que se valoró el sufrimiento psicológico, la angustia emocional y el tratamiento terapéutico que debió iniciar el inspector. El fallo fue apelado por el demandado, por lo que ahora deberá intervenir una instancia superior.