La Policía de Río Negro demoró a cuatro personas que circulaban en una Ford Eco Sport y cuyo comportamiento llamó la atención de los investigadores, en pleno centro de Bariloche. Lo que comenzó como una identificación rutinaria derivó en un hallazgo que encendió las alarmas: ninguno de los ocupantes tenía documentación y la conductora carecía de registro y seguro.
El Cuerpo de Investigaciones Judiciales intervino de inmediato y solicitó apoyo a la Comisaría Segunda, ya que el vehículo se desplazaba por la intersección de Moreno y Beschtedt, una zona de alto tránsito. Con autorización judicial, los efectivos avanzaron en una inspección más profunda del rodado y allí apareció el dato que disparó todas las sospechas: un equipo de comunicaciones presuntamente utilizado para inhibir alarmas y cierres centralizados, herramienta vinculada frecuentemente a maniobras delictivas.
Dentro del habitáculo también se halló una suma considerable de dinero en efectivo, discriminada en distintas monedas: pesos argentinos, reales, pesos chilenos, uruguayos y dólares. Los elementos quedaron bajo custodia y el vehículo fue secuestrado por las irregularidades detectadas, mientras se trabaja en establecer el origen del dinero y el destino de los ocupantes.
La situación generó preocupación en la zona céntrica, donde el operativo policial se desarrolló con fuerte presencia de efectivos y generó curiosidad entre vecinos y transeúntes. La camioneta fue trasladada para su investigación y los individuos quedaron a disposición de la Justicia, que deberá determinar responsabilidades y avanzar en las pericias correspondientes.
La investigación continúa y se espera que en los próximos días se definan las medidas judiciales sobre los cuatro demorados y los elementos secuestrados.