El crimen ocurrió el domingo pasado, después del mediodía, en pleno barrio Nuevo de Roca. La víctima, Juan Ramón Riquelme, fue ejecutada de un balazo en el pecho en el patio de su casa. El agresor, según testigos y la propia fiscalía, fue Javier “Javito” Zurita, de 37 años, quien se dio a la fuga en una Toyota Hilux gris. Desde entonces estuvo prófugo, hasta que este lunes por la tarde se entregó a la Justicia.
El trasfondo del crimen está cargado de rencores y viejas broncas entre vecinos. Según fuentes del caso, todo comenzó con una nueva discusión entre Riquelme y Elio Omar Zurita, padre de Javier. El hombre de 63 años habría sido agredido en más de una ocasión por la víctima, y el domingo la pelea habría escalado hasta el punto de quiebre.
“Javito” no lo pensó demasiado. Apareció armado, apuntó y disparó al menos dos veces. Uno de los tiros impactó directo en el pecho de Riquelme, que cayó gravemente herido en el fondo de su casa. Sin mostrar el más mínimo remordimiento, el agresor escapó manejando su camioneta mientras los vecinos intentaban auxiliar al hombre baleado.
La Subcomisaría 69° desplegó un rápido operativo y detuvo a dos personas, entre ellas al padre de Zurita, que habría estado presente en la escena, y a Javier Emiliano Núñez, un joven de 26 años que, según la investigación, habría colaborado en la fuga.
Desde el primer momento, la fiscal Celeste Benatti ordenó múltiples medidas de búsqueda y mantuvo abiertas las puertas para una entrega voluntaria. No emitió una acusación inmediata: su estrategia fue dejar correr el tiempo y mantener los contactos con el entorno del prófugo, que finalmente aceptó entregarse este lunes por la tarde. Casi en simultáneo la camioneta apareció estacionada sobre calle Montevideo.
Este martes se llevará adelante la audiencia de formulación de cargos contra Javier Zurita, su padre y Núñez. .