Dionisio Martín Antinao, quien murió ayer al mediodía en el Establecimiento de Ejecución Penal 2 de Roca, estaba cumpliendo una condena de 8 años por abuso sexual agravado. La sentencia quedó firme en 2019 tras pasar por el Tribunal Superior de Justicia. Según la causa, el abusador era empleado municipal y durante años trabajó como chofer de un camión recolector de residuos.
El hecho que derivó en su condena ocurrió el 12 de julio de 2017, alrededor de las 17:30, en el domicilio de la víctima en General Roca. De acuerdo con la sentencia, Antinao se presentó en la vivienda buscando a su sobrino para que lo ayudara a limpiar el patio. Cuando el joven se retitó del domicilio, el imputado ingresó por la fuerza, cerró la puerta y atacó a la pareja.
Según consta en los archivos a los que accedió Mejor Informado, la joven víctima se resistió, corrió por el interior de la vivienda hasta que fue alcanzada. El abusador la llevó por la fuerza a la habitación, la tiró sobre la cama. La sujetó fuertemente de las manos. Luego le arrancó la ropa, mientras él se bajaba el pantalón, para luego penetrarla. Todo, mientras la amenazaba diciéndole que no gritara ni se moviera porque le iba a pegar.
La víctima denunció los hechos días después y la causa avanzó hasta juicio. En los tribunales consideraron acreditado el abuso sexual agravado y condenaron a Antinao a 8 años de prisión, sentencia que fue ratificada por el Tribunal Superior de Justicia en 2019.
Durante su estadía en el Penal 2, Antinao estaba alojado en el pabellón 14, destinado a ofensores sexuales, separado del resto de los internos. Su muerte este lunes generó un fuerte operativo interno y mantiene abierta la investigación para determinar la causa exacta del fallecimiento. La fiscalía de turno solicitó la historia clínica, teniendo en cuenta que era un paciente diabético y sufría problemas cardíacos.