Un nuevo ataque que alarma a la ciudad
Durante la audiencia de formulación de cargos por el homicidio de dos adolescentes en el barrio Nehuen Che de Cutral Co, la fiscalía presentó pruebas que involucran a Carlos De la Vega, uno de los dos acusados, en otro episodio de violencia extrema. El 17 de agosto, habría disparado contra Lucas Hernández, un joven que se encontraba cumpliendo prisión domiciliaria, y le provocó heridas en la cara y la espalda.
La víctima tuvo que ser trasladada de urgencia al hospital, donde sufrió complicaciones respiratorias y todavía sigue en terapia intensiva bajo custodia policial. La gravedad del ataque y el uso de arma de fuego suman otro capítulo de terror a la ciudad, que sigue conmocionada por la escalada de hechos violentos vinculados a los mismos imputados.
La fiscalía había acusado a De la Vega de homicidio en grado de tentativa agravado por el uso de arma de fuego, mientras que su defensa está a cargo del Ministerio Público. El juez formalizó la imputación y extendió la investigación para esclarecer los detalles del ataque.
El ataque previo: miedo y caos en el barrio Pampa
La madrugada del domingo 17 de agosto, la policía acudió a un domicilio de calle Río Limay tras un llamado que alertaba sobre un hombre gravemente herido por disparos. Hernández presentaba lesiones en el rostro y la espalda, y debido a la falta de ambulancia disponible, fue trasladado nuevamente por personal policial ante un paro cardiorrespiratorio.
Familiares y vecinos quedaron conmocionados por la brutalidad del ataque. La intervención policial incluyó Criminalística y la Brigada de Investigaciones, siguiendo las directrices de la fiscalía, mientras la víctima luchaba por su vida en la Unidad de Terapia Intensiva.
Todos los hechos que vienen ocurriendo en Cutral Co reafirman la percepción de una ola de violencia que mantiene a la localidad en tensión, en la que los delitos graves parecen multiplicarse y los vecinos viven con miedo a cada paso.
Cutral Co exige justicia y seguridad
Los antecedentes delictivos de De la Vega y su vinculación con Canihuán generan bronca e indignación. La comunidad reclama medidas efectivas para frenar a quienes protagonizan ataques con armas de fuego y, al mismo tiempo, garantizar la seguridad de los barrios.
Mientras la fiscalía continúa con la investigación, los vecinos observan con preocupación cómo un mismo grupo de jóvenes está implicado en múltiples hechos de violencia que sacuden la ciudad y reflejan un clima de inseguridad que no da tregua.