Un grupo de delincuentes armados sembró el terror en una casa del barrio Costa Norte, a la vera del río Neuquén. Maniataron a toda una familia en plena madrugada y se quedaron más de dos horas dentro de la vivienda, hasta que las víctimas lograron liberarse y pedir ayuda.
El violento robo ocurrió el sábado, cerca de las 5.30, en una vivienda de la calle Los Horneros de Cipolletti. Según contaron los damnificados, todo comenzó con ruidos extraños en el interior de la casa. El dueño, un hombre de 32 años, se levantó para ver qué pasaba y de golpe se topó con dos sujetos armados con pistolas que lo encañonaron y lo obligaron a regresar a la habitación. Allí lo ataron de pies y manos junto a tres personas más que estaban en el lugar.
Los delincuentes eran tres hombres y una mujer. Revolvieron todo el inmueble y cargaron con televisores, celulares y distintos objetos de valor. Para trasladar el botín utilizaron el mismo taxi en el que habían llegado.
Sin embargo, el conductor nada tenía que ver con la banda. Apenas notó la actitud sospechosa de sus pasajeros y los elementos que le hicieron cargar, decidió dar aviso al centro de comunicaciones. Incluso volvió a la casa con parte de lo robado y se encontró con la Policía que ya había sido alertada por las víctimas.
Una de las claves de la investigación fue el rastreo de un celular denunciado como robado. Gracias al GPS, los efectivos localizaron a una mujer en inmediaciones de la calle Yrigoyen, en pleno centro de Cipolletti. Fue detenida de inmediato y en su poder tenía el aparato sustraído.
La sospechosa quedó a disposición de la Justicia, mientras que los investigadores trabajan para dar con los tres cómplices, que siguen prófugos.