Un hecho tan curioso como insólito alteró la tarde de Roca el pasado lunes. Una mujer que había ido a hacer las compras junto a sus tres hijos terminó detenida tras llevarse algo más que la mercadería: guardó un changuito completo en el baúl de su Chevrolet Corsa. La escena obligó a la Policía de Río Negro a montar un operativo que pareció sacado de una película de acción: cuatro uniformados y dos móviles de la Comisaría 3° persiguieron a la mujer durante varias cuadras hasta interceptarla en plena ruta chica.
Todo comenzó cerca de las 17, en el supermercado ubicado en la esquina de Tucumán y San Juan. La mujer realizó la compra con total normalidad, pagó en la línea de cajas, cargó las bolsas y, sin que nadie lo advirtiera en un primer momento, decidió completar el combo levantando el changuito de metal y acomodándolo en el baúl del auto. Con sus tres hijos como testigos silenciosos, se retiró del lugar como si nada hubiera pasado.
Pero la maniobra no pasó inadvertida por mucho tiempo. Desde el supermercado dieron aviso inmediato al 911, y con la colaboración de los operadores del sistema de monitoreo urbano, lograron ubicarl. La Policía reaccionó con una rapidez llamativa y en cuestión de minutos, dos patrulleros y cuatro agentes se lanzaron a la caza de la mujer. Como si se tratara de un robo millonario o de un delincuente peligroso, el operativo se desplegó sobre varias cuadras de la ciudad, hasta alcanzar la ruta Provincial 65, casi en la intersección con la ruta Provincial 6, a unos 20 cuadras del comercio.
Allí, el Corsa de color gris fue detenido y la conductora trasladada a la Comisaría 3°, donde se labraron las actuaciones correspondientes. El changuito, ese inesperado botín que generó semejante despliegue, fue secuestrado como prueba del delito.
El caso, que roza lo bizarro, no tardó generar reacciones entre quienes pasaban por ruta 65 y se encontraron con semejante despliegue policial. Otros, en cambio, destacaron la eficacia del accionar. Lo cierto es que la anécdota quedará en el archivo como uno de los procedimientos más curiosos de los últimos tiempos en Roca: una persecución con móviles, sirenas y uniformados para recuperar un changuito de supermercado.