La Policía Federal volvió a golpear a la venta de droga en Cipolletti. Otra vez las que terminaron tras las rejas fueron dos mujeres, vecinas que manejan un kiosco narco barrio 1200 Viviendas. Ambas quedaron con prisión preventiva luego de una investigación que arrancó en mayo y que ya había tenido un primer capítulo con un allanamiento en julio.
En aquel operativo, la División Antidrogas Cipolletti había secuestrado droga, dinero en efectivo y otros elementos clave que confirmaban la actividad ilegal. Las sospechosas habían sido detenidas, pero días más tarde recuperaron la libertad por orden judicial, mientras se analizaba su grado de responsabilidad.
Con las pruebas sobre la mesa, el juez Federal de Roca, Hugo Greca, dispuso que las dos mujeres sean detenidas nuevamente y esta vez les dictó prisión preventiva. Quedaron a disposición de la Justicia Federal mientras avanza la causa por comercio de estupefacientes.
El procedimiento se llevó a cabo en inmediaciones del populoso barrio cipoleño y estuvo a cargo de la División Antidrogas local, con respaldo del flamante Departamento Federal de Investigaciones. Desde la fuerza remarcaron que el objetivo es cortar los puntos de venta barriales que abastecen el narcomenudeo en la región.