"Me voy a morir, me voy a morir", gritaba el nene de 8 años mientras era trasladado al Hospital Heller, con un cuchillo tipo tramontina clavado en su cabeza. Los gritos del menor retumbaban dentro del auto de Mario, un vecino del barrio Villa Ceferino, que decidió no esperar la ambulancia y trasladarlo rápidamente al Hospital Heller.
El domingo, alrededor de las 11 y cuando se preparaban para pasar el día en el río, en una vivienda de la calle Abraham, una discusión entre madre e hijo terminó de la peor manera. La mujer tomó una bolsa, en cuyo interior había diversos elementos, entre ellos un cuchillo, que impactó en la zona parietal izquierda de la cabeza de su hijo. A raíz del golpe recibido, el cuchillo se incrustó en la mencionada zona.
En diálogo con el Noticiero Central de 24/7, Mario, el vecino que trasladó al nene junto a su madre hasta el hospital, contó que escuchó que alguien "pedía auxilio" que llamaran a la ambulancia. "Cuando me acerqué a la vivienda los vecinos lo estaban asistiendo, le pusieron paños mojados", dijo Mario, quien es propietario de la vivienda que alquila la mujer.
El menor ingresó al Heller pero a raíz de la gravedad de la lesión fue derivado al Hospital Castro Rendón, donde de acuerdo con los registros médicos, ingresó con “trauma penetrante de parietal izquierdo con arma blanca” y debió ser intervenido quirúrgicamente, según informó la fiscal del caso Silvia Moreira durante la audiencia de este martes en el que se le formularon cargos a la madre por haber lesionado en la cabeza a su hijo y haber puesto en riesgo su vida.
La madre del menor fue acusada por el delito de lesiones graves, agravadas por el vínculo y por alevosía. Además como medida cautelar, solicitó al juez que imponga una restricción de acercamiento y contacto por 2 meses, hasta que la víctima pueda ser evaluada para dar su testimonio mediante el dispositivo de Cámara Gesell. Respecto del tiempo para la investigación, solicitó que se fije en cuatro meses.
"Fue un accidente doméstico", explicó la madre de 26 años.
El informe médico detalló que el menor sufrió herida "penetrante de arma blanca en región parietal izquierda del cráneo, con incisión quirúrgica de 10 centímetros, con catorce puntos de sutura, lesión que puso en riesgo su vida". Luego de permanecer internado en terapia intensiva, en las últimas horas el menor pasó a un área de menor complejidad en el Hospital Castro Rendón.
Mario se mostró sorprendido por el hecho ocurrido. "Es extraño lo que pasó", dijo el hombre porque las veces que los vio juntos "lo atendía bien, el cariño de madre a hijo era bueno, nunca escuché discusiones, ella llegaba del trabajo y se metía en la casa, nunca escuché que lo maltratara por eso me extraña lo que pasó". "No sé cómo sería adentro", agregó.
Mario se mostró sorprendido por el hecho ocurrido. "Es extraño lo que pasó", dijo el hombre porque las veces que los vio juntos "lo atendía bien, el cariño de madre a hijo era bueno, nunca escuché discusiones, ella llegaba del trabajo y se metía en la casa, nunca escuché que lo maltratara por eso me extraña lo que pasó". "No sé cómo sería adentro", agregó.
Mario no puede dejar de recordar esos minutos de camino hacia el hospital Heller. Lo trataba de calmar al chico que gritaba: "Me voy a morir, me voy a morir". "Yo le decía 'Quedate tranquilo, ya te llevo al médico, no te va a pasar nada'", concluyó.