Argentinos por el mundo
Coronavirus: Testimonios exclusivos desde China e Italia
Valentina y Natalia son dos argentinas que por una elección de vida y por estudios residen en China e Italia, ambas contaron sus experiencias sobre cómo viven el aislamiento en medio de la pandemiaValentina del Río es estudiante y desde hace dos años vive en China, en una ciudad que limita con Hong Kong, con muchos habitantes y gran movimiento. Particularmente allí hubo panoramas muy diferentes, desde las personas en aislamiento pero que podían salir a hacer compras y sacar sus mascotas, como es su caso, hasta sectores donde a la gente no se le permitía salir para nada.
Cuando se dieron los primeros casos de coronavirus en realidad no sabían de qué se trataba, cuenta Valentina. El primer caso fue en diciembre, se dio en un estudiante con una fuerte neumonía y los casos se sumaban, se hablaba de un virus, pero era algo nuevo que se investigaba con cada caso.
El gobierno les pidió aislarse, que no haya movimiento y que cada uno se quede en su casa, “Shockeaba ver como todo de repente estaba parando” cuenta la joven. La particularidad del momento según explica, es que el aumento de casos se dio “justo en año Nuevo Chino, cuando la gente se va a sus pueblo natales “fue muy difícil volver y cumplir con el aislamiento, hubo mucho movimiento, pero se dio tiempo para que la gente pueda volver a sus casas y empezar la cuarentena”.
“Fue muy raro lo que se vivió, muy rápido, el gobierno tomó acciones muy rápidamente, hubo mucha contención también” dice Valentina quien vive ahora con las mascotas de su amiga, también argentina, que no pudo volver.
Desde hace dos semanas comenzó a verse movimiento, de a poco vuelven a sus rutinas, pero la gente sigue respetando las medidas, en algunos lugares se sigue tomando la temperatura y el uso de barbijo si bien no es obligatorio es algo natural en ellos.
En Italia, en la región de Lombardía, una de las zonas más afectadas por esta pandemia está Natalia Musetti, quien vive con sus dos hijos, uno de 9 y otra de 13 años, aislada entre medios de tareas por internet, juegos para pasar las horas y limpieza general.
Natalia contó que el 22 o 23 de febrero se descubrió el primer caso a unos 60 km de su ciudad, primero suspendieron las actividades deportivas y luego cerraron las escuelas. “La gente seguía yendo a trabajar, no pensaban que era tan importante”.
Los casos comenzaron a sumarse y “la región de Lombardía pasó a ser zona roja y luego toda Italia”, todo está cerrado y solo se puede salir para hacer las compras básicas.
Al igual que en Argentina hay gente que no cumple con la cuarentena, para esos hay una multa de hasta 3 mil euros, también el gobierno controló el precio de uno de los productos como aquí el alcohol en gel, ya que no se encontraba en ningún lado y quienes lo vendían lo hacían a un precio excesivo.
Natalia radicada desde hace 15 años en Italia, sale una vez a la semana para hacer las compras, ve a sus vecinos por el balcón, sale con entusiasmo a sacar la basura como si fuese a pasear (como muchos) pero no tiene contacto con absolutamente nadie.
Tanto Valentina como Natalia, coincidieron que lo importante hoy es respetar al otro, ser responsable y cumplir la cuarentena. "Sin Miedo", dice Natalia "pero sin subestimar la situación" para que esto se termine pronto.