POLÍTICA EN NEUQUÉN
La conjunción entre Figueroa y Rioseco, un dato a tener en cuenta
Es una relación que se va consolidando, y que, al menos por ahora, implica mutua conveniencia.Los frecuentes encuentros entre Ramón Rioseco y Rolando Figueroa son, más allá de la cuestión institucional que no puede soslayarse, entre un intendente y un gobernador, un dato en sí mismo a tomar en cuenta para la proyección del escenario político provincial.
Rioseco, quien durante décadas se posicionó como opositor al oficialismo provincial del MPN, ahora encuentra otro rol, mucho más amigable, con la gestión de Figueroa. El hecho de que el gobernador sostiene una amplia coalición, integrada entre otros por peronistas y parte del histórico Frente Grande, le da la posibilidad al veterano caudillo de la vieja comarca petrolera de seguir vigente en las expectativas políticas de la provincia.
Rioseco fue muchas veces candidato por el kirchnerismo, a gobernador. Fue parlamentario del Mercosur, por ese sector de la política nacional. Pero ahora, ya en su tercera intendencia, ha enterrado, al menos coyunturalmente, el hacha de guerra, y, sin fumar la pipa de la paz por completo -manteniendo su independencia comarcal- ha encontrado en el gobierno de Figueroa respuestas concretas y coincidentes con sus planes.
Para Figueroa, tener un virtual aliado en el cutralquense, es, sin duda, importante. Afianza sus alianzas territoriales, y, además, anula acciones en su contra de sectores peronistas reacios a sumarse a la "neuquinidad", que, liderados por el senador Oscar Parrilli y el diputado provincial Darío Martínez, pretenden construir una opción opositora.
Es un dato a tener en cuenta esta relación de, al menos por ahora, mutua conveniencia, y que va más allá de lo institucional, para entrar de lleno en la política a secas.